El empirista
Desde el 1º de enero de 2012 y, como si fuéramos ratones de laboratorio, Petro y sus conmilitones experimentan con nosotros los 7 millones de habitantes de Bogotá que no votamos por su experimento de Bogotá Humana. Los “normales” que su gobierno discrimina por no ser “diferentes” dentro de su decálogo de normalidad y diferencia y que no tenemos derecho sino a observar y acatar lo que su señoría decida. Ah, y por su puesto ceder el paso ante lo que no sea “normal” en su imaginario de diferencias. Su último anuncio populista no es más que otro experimento. Su emisario, el gerente de Metrovivienda, anunció que en siete lotes ubicados en los barrios El Chicó, El Lago y Santa Bárbara se construirán 372 viviendas de interés prioritario, 356 parqueaderos y 2.250 metros cuadrados de áreas comerciales o de servicio.
La razón de la decisión obviamente no tiene otro fondo que fines populistas, electorales y de revancha social, tal vez para salvar su moribundo partido político:“Con estos proyectos queremos demostrar que sí es posible que convivan las víctimas del conflicto armado con el resto de la comunidad”.No quieren sino demostrar algo. Provocar un fenómeno social para estudiarlo y observar sus efectos. Es decir: experimentar. Empirismo puro.
Hasta ahora lo único demostrado con sus experimentos sociales, señores humanos, es que las diferencias están únicamente en sus cabezas. Ustedes estigmatizan a los bogotanos de acuerdo con el lugar en donde viven. Nos clasifican y juzgan de acuerdo con lo que su clasificación mental les dicta. ¿De qué se quieren vengar? ¿Contra quién? ¿Los VIP de sus cabezas? ¿Creen que a la gente le importa saber quien vive al lado? En la vida real, en el que llaman ustedes sectores VIP, no se sabe quien vive al lado ni interesa. Ahora sí se va a saber quienes viven al lado. El rey de las diferencias los usará para exhibirlos como floreros y demostrar repito:“que sí es posible que convivan las víctimas del conflicto armado con el resto de la comunidad”.
Además, si se trata de igualdad, la Corte Constitucional dijo desde 1992 que el principio de la igualdad es objetivo y no formal. No se trata de establecer una igualdad matemática como ustedes quieren experimentarla. Si fuera así, entonces que todos podamos ser alcaldes de Bogotá al menos un día. ¡Sentir que es el poder absoluto!
@ReyesJuanfelipe