HENRY BRADFORD SICARD | El Nuevo Siglo
Jueves, 13 de Marzo de 2014

Retos del nuevo Congreso

 

Luego de las pasadas elecciones para el Congreso de la República, durante las cuales los colombianos elegimos a los nuevos legisladores que empezarán labores el próximo 20 de julio en el Senado y en la Cámara de Representantes, me queda un buen sabor de boca. Creo que el gran ganador fue el partido Centro Democrático, el cual, a pesar de tener un logo autorizado con sólo pocas semanas de anticipación, sumado a la gran confusión de muchos compatriotas que creían que el partido de la U era el partido del expresidente Álvaro Uribe Vélez e incluso el uso de propagandas que confundían a los ingenuos, logró obtener un número elevado de votos y 20 curules en el Senado. Considero que él, junto con su colectividad, trabajarán incansablemente para alcanzar metas positivas para el país. Tendrán que llegar a acuerdos con otros partidos para solucionar temas importantes para el desarrollo de Colombia.

El reto del próximo Congreso es gigante; este órgano legislativo tiene la gran responsabilidad de debatir aquellos proyectos e iniciativas que logren encaminar al país por la senda de crecimiento económico y progreso general. Enfrentará temas clave y de mucho impacto para todos nosotros: reforma de la salud, reformas a la educación, proyectos de regalías para la explotación del sector minero, proyectos para incentivar el sector agropecuario, posible reforma tributaria y acuerdos comerciales pendientes por ratificar.

Quizás uno de los retos más grandes que enfrentará este Congreso será el de legislar y regular los acuerdos que se alcancen en La Habana; medidas que se pacten en el proceso de paz, bandera del actual Presidente, requerirán de muchos debates y acuerdos por parte de estos legisladores.

Espero que la visión de todos los parlamentarios, o por lo menos de la mayoría, sea la de buscar realmente el progreso de Colombia. No podemos desaprovechar las oportunidades que aún se siguen presentando en cuanto a temas de comercio internacional o de inversión extranjera: varios acuerdos están por definirse en el Congreso y otros estarán llegando a debate en poco tiempo; Colombia ha venido aumentando su globalización, pero aún queda un camino por recorrer para lograr un desarrollo productivo que jalone varios sectores de nuestra economía. Es indispensable, también, que el Congreso sea muy cuidadoso al estudiar y debatir estos acuerdos para no afectar o incluso, destruir, sectores que actualmente generan empleo y riqueza.

El sector del agro está a la espera de varios acuerdos y proyectos que logren dinamizarlo y hacerlo más productivo para que nuestros campesinos tengan un mejor futuro. El gran desarrollo que ha tenido el país en la última década se ha focalizado en las grandes ciudades, pero el campo se ha rezagado en capacidad productiva y en eficiencia. 

Termino con otros retos que tendrá este Congreso: pobreza extrema, medio ambiente, minería y recursos naturales serán temas prioritarios, pero quizás lo más importante es que cada uno de los congresistas vele por el interés común y deje de lado tantos prejuicios políticos que lo que hacen es interferir con el futuro de Colombia. Suerte al nuevo equipo de congresistas.