Nuevos negocios e innovación
En los últimos años, varios países de Latinoamérica han visto incrementos sustantivos en sus índices de nuevas empresas; la situación económica de esta región del mundo ha provocado que inversores internacionales diversifiquen los riesgos que tenían en países desarrollados, creando negocios en países en desarrollo.
Nuestro país continúa siendo un lugar propicio para iniciar nuevos negocios o emprendimientos en diferentes sectores de la economía. Cada día es más común ver en Colombia personas de todas las edades, desarrollando nuevas ideas de negocios. La última década nos ha dejado un buen sabor de boca en cuanto a la situación económica se refiere: la clase media se ha incrementado sustancialmente, hemos tenido buenos crecimientos de nuestra economía en tiempos difíciles de la economía global, la política de seguridad democrática iniciada por el presidente Uribe, la estabilidad política, el incremento de la inversión extranjera directa y la estabilidad de las finanzas públicas, han generado un ambiente favorable para aquellos que quieran iniciar nuevos negocios en Colombia.
Pero no basta con tener buenas ideas para poder iniciar actividades; es necesario que esas buenas ideas sean presentadas de manera eficiente a muchos de los inversionistas “ángeles” que ahora se pueden encontrar en el país. Estos inversionistas, dadas sus capacidades económicas, están en la búsqueda de aquellos proyectos de buen potencial medido, en gran parte, por el grado de innovación que tenga la idea de negocio.
Precisamente la semana pasada tuve la oportunidad de asistir a la Cumbre Mundial de Innovación en Silicon Valley; dicha cumbre estaba enfocada en cómo se deben crear ecosistemas de innovación que ayuden a desarrollar la creatividad de las personas para que puedan, a su vez, desarrollar ideas innovadoras de negocios. Estos ecosistemas se nutren de un trabajo conjunto entre diferentes actores tales como Gobierno, sector privado, colegios y universidades, que a través de compartir experiencias, conocimientos, investigación y coordinar infraestructura, políticas, dinero y talento, logran desarrollar las ideas que tendrán buen impacto en la economía.
Varios emprendedores jóvenes han sido galardonados en nuestro país, por sus ideas innovadoras que además de rentables, generan impacto en la economía y en la sociedad. Por mencionar sólo dos de ellos, quiero hacer referencia a Punto Red, un emprendimiento liderado por unos hermanos ( Andrés Albán y Mauricio Hoyos) a través del cual ofrecen una red electrónica de cobros y pagos para personas no bancarizadas y de escasos recursos, lo que les permite acceder a servicios financieros, con el solo uso de su teléfono celular. Otro ejemplo de emprendimiento y liderazgo social es la Fundación Buena Nota (fundada por Juan David Aristizábal y Juan Manuel Restrepo) dedicada a apoyar proyectos de emprendimiento social.
Así como estos ejemplos, existen cientos de nuevos negocios que además de crear empleo, están generando ingresos a sus accionistas, impuestos al país y beneficio a la economía y a la sociedad. Debemos seguir abonando este buen ecosistema para que la prosperidad siga su rumbo positivo y muchos más emprendedores en nuestro país logren hacer realidad sus sueños.