GUILLERMO FRANCO CAMACHO | El Nuevo Siglo
Domingo, 15 de Diciembre de 2013

Think Tank

 

La Escuela de Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Sergio Arboleda produjo cuatro estudios bajo el título Chavismo sin Chávez. Un modelo en suspenso (octubre, 2013) al que se vincularon la Corporación Pensamiento Siglo XXI y Opel. El prologuista, Camilo Ospina, exministro de Defensa de Colombia, se refiere al régimen citado como un éxito político, no económico, ¿por llevarse a cabo, según lo planeado? Insiste, luego, en que el chavismo busca mantenerse en el poder a toda costa por temor inclusive a la cárcel. Por último, estima que dicho movimiento político puede caer a mediano plazo pero ninguno de los autores, de los textos incluidos, formula una predicción semejante.

El primero de los referidos estudios es “Venezuela: del Sistema de Partidos a la Concentración Partidista” de Nicolás Alejandro Liendo y Manuel Camilo González, ambos, al igual que los restantes autores, miembros de la Escuela indicada; la tesis de arranque consiste en que la crisis de la democracia venezolana reside en fallas de los partidos políticos tradicionales, o sea, Acción Democrática (AD) y Copei. Desaparece el sistema partidista y es remplazado por concentraciones chavista y antichavista con influencia regional. Las fallas o causas se clasifican en internas (pérdida de identidad), externas (los intentos golpistas) e institucionales (las personalidades se vuelven más importantes que los partidos); los factores entre paréntesis son ejemplos y no agotan las posibilidades.

El chavismo llegó al poder en elecciones libres celebradas en 1998, o sea, por la vía democrática; no fue la primera vez que un líder ajeno a tales prácticas logra el poder así, es decir, al concluir que por las vías de hecho no lograría sus fines. Los autores citan, como ejemplos, a Velasco Alvarado y Torrijos en Perú y Panamá en su orden pero olvidan el caso más destacado en el siglo XX: Hitler.

¿Hay posibilidad de retorno a la vía democrática, de recoger los intereses de todos los ciudadanos, incluyendo la oposición? Conviene buscar indicadores y el primero es el electoral favorable a Chávez en vida; sin embargo, una vez fallecido, Maduro triunfó por margen mínimo en  el proceso presidencial de 2013 y sin realizarse el reconteo de los votos; asimismo, las elecciones legislativas complicaron la aprobación de la ley habilitante. La coalición gubernamental tiene considerable respaldo popular y las fuerzas armadas son chavistas.