GENERAL (R.) LUIS ERNESTO GILIBERT V | El Nuevo Siglo
Miércoles, 1 de Octubre de 2014

Comparendos, cámaras y dudas

 

DE  cara a los comentarios e informaciones que han circulado en los medios de comunicación sobre el tema de los comparendos y sus cobros, nos queda un sabor agridulce a todos los ciudadanos que por una u otra razón, hacemos parte del engranaje vial.

Sabemos que en sitios estratégicos de la ciudad se instalaron una serie de cámaras para controlar la observancia de las normas del tránsito por los conductores, dispositivos capaces de sacar fotos o filmar la infracción en tiempo real; eso es bueno, la tecnología al servicio del  orden, la vigilancia y el cumplimiento de la ley, mejor todavía si como se ha venido pregonando, las fotos junto con el comparendo y valor de la multa, son remitidos al dueño del vehículo identificado por el sistema, cuya dirección de residencia nombre e identidad, reposan en las bases de datos al servicio de estas entidades responsables del ejercicio, bien sean  contratistas u oficinas de transito propietarias y operadoras de la red, otro método de regulación y control lo realizan los miembros de la policía pertenecientes a la especialidad, quienes ante infracciones levantan o elaboran comparendos, que aparecen en el historial del vehículo y  conductor, obligándolos tras ello a cancelar el valor del parte en tiempo determinado, pudiéndose incrementar el monto con intereses por mora en el pago, eso también es bueno, pues estos servidores públicos están en la obligación de aleccionar y disciplinar los conductores, que olímpicamente transgreden las reglas de tránsito, poniendo en peligro la vida e integridad tanto de peatones, como de otros conductores víctimas de irresponsabilidad, incapacidad  y desconocimiento de las normas.

Qué benéfico contar con estas alternativas asegurando disciplina, buena conducta y responsabilidad en el uso de las vías. Hasta ahí lo positivo; ahora miremos la otra cara de la moneda, una persona seria y cumplidora de la ley estaciona su auto en  sitio prohibido, pero sin anuncios de restricción a la vista, o descuidadamente hace cruce indebido, la cámara saca la foto, y no obstante tener la información el tránsito, nunca llega el documento con la resolución ni la fotografía, a su residencia y el día que por casualidades del destino se entera de la realidad, aparece en mora ante las autoridades, ¿qué hacer? A quién recurrir en  busca de solución; otro tanto se puede presentar con partes elaborados por agentes del tránsito, donde el infractor no fue notificado ni firmó el comparendo, quedando en circunstancias similares a la foto, total a pagar una multa con intereses de mora  por no tener  información oportuna. ¿Será que debemos entrar semanalmente al sistema para saber cómo van nuestras cuentas? ¿Será que el tránsito debe agotar los medios a su alcance para notificar? O ¿será que conviene ocultar para incrementar el valor de las multas?