Respetuoso debate
Lo que nos faltaba: el Procurador se convierte en otro enemigo de la paz en Colombia y toma partido al lado del uribismo para boicotear los diálogos de La Habana. ¿Qué persigue el “defensor” de la sociedad con esta salida en falso, según la cual el Gobierno está negociando con las Farc la estructura de la Policía? ¿Bloquear, obstruir u obstaculizar en proceso? Esa no es propiamente la función de un Procurador o funcionario de un país en guerra que afanosamente quiere la tranquilidad y el sosiego que nos trae la paz.
No es extraño que desde adentro se combata y desprestigie las negociaciones sobre la paz, ya que habrá muchos a los que les conviene la guerra y la masacre de nuestros compatriotas.
Los miembros de las Farc que se reincorporen a la sociedad deben quedar con todos los derechos que los demás colombianos. Solo así se garantiza que nuestra sociedad logre la tranquilidad que esperamos con la firma de los acuerdos de La Habana. Si algunos de ellos quieren sumarse a la Policía deberían tener esa posibilidad. O como lo ha dicho el Presidente, pueden ser guardabosques, pero bajo el control de la Policía. Es claro que no se trata de crear un cuerpo armado para incorporarlos, así rezan los acuerdos.
También se ha hablado de conformar grupos de desmovilizados que, junto con miembros de la Fuerza Pública, avancen hacia la eliminación de las minas que los grupos subversivos han sembrado en nuestro territorio.
En esta época electoral, todos quieren aprovechar la ocasión para hacer protagonismo, y qué mejor que armar debates sobre los acuerdos, que soportan todos los trinos, que la oposición y los ángeles de la guerra lanzan.
El Presidente lo ha reiterado: “no hay ninguna razón para decir que estamos negociando la Fuerza Pública en La Habana” y explicó que las Farc sí han querido introducir ese tema, pero que el Gobierno ha sido tajante en manifestarles que ese asunto está fuera de cualquier consideración.
El Procurador debe ser ecuánime, como lo exige su cargo y adelantar, como él mismo lo dice: “un debate argumentado y respetuoso”. Sus trinos y su lenguaje, no son propiamente de ese talante y ponen en duda muchas cosas.
Blanco. Por fin una decisión sobre el túnel de La Línea.
Negro. La forma de Maduro amenazar. Que libere a Leopoldo López, preso político.