La última gran batalla
La campaña por la libertad del Nuevo Reino de Granada había iniciado hace 77 días desde Venezuela por el general Bolívar. La guerra en Venezuela había sido aplazada y el ejército libertador había recorrido 200 kilómetros y 45 días en medio del invierno hasta llegar a la población de Tame, ubicada en el Casanare, en donde se suma la división del general Santander.
La marcha avanza por los Llanos Orientales, cruzan el páramo de Pisba e ingresan al territorio de la provincia de Tunja. Allí los esperaban las tropas del ejército realista, al mando del coronel José María Barreiro, y tiene lugar la batalla de Gámeza, en la que el ejército libertador obtiene la victoria.
Las acciones militares continúan, el ejército libertador mantiene su avance hasta encontrarse de nuevo con las fuerzas realistas en la batalla del Pantano de Vargas. Allí 2.400 hombres pertenecientes a las provincias unidas de la Nueva Granada, a la tercera República de Venezuela y a la Legión Británica se enfrentaron contra 1.800 del Imperio Español. Luego de aproximadamente 150 bajas del ejército libertador y de 250 del Imperio español (cifras estimadas para las bajas históricamente reportadas por cada uno de los ejércitos), el general Bolívar y los patriotas obtienen de nuevo la victoria.
El ejército libertador descansa hasta el 3 de agosta para renovar sus fuerzas y salir de nuevo a perseguir a su adversario. Los realistas habían emprendido la retirada hacia Bogotá para reagruparse con las fuerzas del virrey Sámano y enfrentar de nuevo al ejército libertador. Bolívar logra enterarse de estos planes, y se adelanta con su ejército hasta el puente de Boyacá para impedir la retirada de los realistas.
2.850 hombres, muchos de ellos campesinos, se enfrentaron contra 2.650 hombres del ejército realista. Fue una batalla memorable, por la destreza estratégica y táctica de Bolívar y Santander. El ejército libertador y sus respectivos batallones avanzaron con rapidez, sorprendieron al enemigo y lograron su derrota y retirada. Los resultados fueron demoledores, el ejército realista sufrió 100 muertos, 150 heridos y 1.600 capturas, frente apenas a 13 muertos y 53 heridos del ejército liderado por Bolívar. Esta fue la Batalla de Boyacá, la que podría denominarse como la última gran batalla que condujo a libertad de nuestro país, y que se realizó el 7 de agosto de 1819. (Ver wikipedia, la batalla de Boyacá.)
La libertad de nuestra nación costó el derramamiento de la sangre de muchos hombres valientes que soñaron con un país libre de la tiranía del Imperio Español. Sin embargo, la pregunta hoy día es ¿cómo podremos ser libres de la tiranía de la injusticia, la corrupción, el temor, la pobreza y la violencia?
¿Qué nación queremos en las próximas décadas? Cada acción de fe en un mejor mañana, justa y de bondad de todo hombre, familia, del Estado y de la sociedad nos conducirán a una mejor Colombia de la mano de Dios.
@feliperangel81
*Politólogo