Con éxito finalizaron ayer las negociaciones entre Costa Rica y Colombia para establecer un Tratado de Libre Comercio (TLC), hecho que ambas partes calificaron de "balanceado" y que facilitará el intercambio y las inversiones.
El ministro de Comercio, Industria y Turismo de Colombia, Sergio Díaz-Granados, y la ministra de Comercio Exterior costarricense, Anabel González, manifestaron, tras reunirse en San José, que el TLC es "balanceado" y "positivo" para ambos países.
Ambos funcionarios firmaron una declaración conjunta en la que dieron por cerradas las negociaciones que iniciaron en junio pasado.
El acuerdo comercial incluye el 96% de los productos con solo un 4% de exclusiones, entre las que se encuentran algunos lácteos y carnes, cerveza, chicles, algunos productos plásticos, de papel y de metalmecánica.
El 70% de los bienes ingresará con libre comercio inmediato, mientras el 26% tendrá plazos de desgravación de 3, 5, 10 y 15 años, entre ellos algunos plásticos, jabones y productos de madera y aluminio.
"Estamos muy complacidos de haber concluido la negociación del TLC entre Costa Rica y Colombia. Es un anhelo de larga data de los dos países y estamos satisfechos de haber alcanzado un balance positivo para los intereses de los dos", dijo en una conferencia de prensa la ministra González.
Después de una revisión legal de rigor, el TLC probablemente podrí ser firmado por la presidenta costarricense, Laura Chinchilla, y el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, el próximo 23 de mayo en una cumbre de la Alianza del Pacífico que se realizará en Colombia.
Por su parte, el ministro colombiano Sergio Díaz-Granados dijo a la salida de la negociación que se va "complacido" por los resultados.
"Este tratado es un paso importante con el que Costa Rica accede a un mercado cuyo tamaño poblacional y en materia de comercio es similar a Centroamérica y le da la oportunidad a las empresas costarricenses de ampliar su portafolio de negocios", comentó.
En 2011 Costa Rica exportó a Colombia 48,2 millones de dólares, mientras las ventas colombianas al país centroamericano sumaron 455,7 millones de dólares.