La fuerte expansión económica, la gestión política y el crecimiento de los ingresos, han convertido a Colombia entre los países con menor riesgo para los inversionistas extranjeros.
De acuerdo con un informe de la firma AON, consultor en seguros, reaseguros y recursos humanos, el país ha mejorado su calificación en la última década, debido a su aceptable crecimiento económico, a la gestión macroeconómica y el aumento de los recursos, han ayudado a reforzar la estabilidad política y a propiciar un clima favorable para la inversión.
En su análisis denominado Mapa de Riesgo Político 2013 que mide en 163 países del mundo la temperatura para los negocios e inversiones extranjeras, en el caso de América Latina, Colombia figura con la calificación de ‘riesgo moderado’, después de Brasil y Uruguay que registraron ‘poco riesgo’.
Sin embargo, los países que registraron ‘riesgo alto’ fueron Venezuela, seguida por Bolivia, Paraguay, Argentina y Ecuador.
La firma revisa, asimismo, los niveles de peligro para los negocios e inversiones extranjeras, así como los riesgos derivados de la transferencia de divisas, aspectos legales y regulatorios y las interferencias políticas.
Este año el estudio reveló que los riesgos políticos para las empresas en mercados emergentes son considerables, pero se han reducido respecto a 2012, teniendo en cuenta que los efectos contraproducentes de la llamada “Primavera Árabe”, la crisis financiera internacional y las tensiones en el sur de Asia eran evidentes en ese entonces y actualmente han disminuido.
Según la compañía investigadora, las razones por las cuales el país se mantiene en “riesgo medio” son los niveles moderados de violencia política, de igual forma presenta impago soberano y riesgo de tipo de transferencia.
Señala el informe que el riesgo legal y regulatorio es moderadamente alto, los controles de corrupción son medianamente óptimos al igual que la protección de la propiedad intelectual, así como la baja calidad de las carreteras y los ferrocarriles mantienen el riesgo de interrupción de la cadena de suministro elevado.
Indica AON que “a pesar de los esfuerzos en las negociaciones de paz con las guerrillas de las FARC y una reducción de la violencia política en los últimos años, los indicadores de los crímenes organizados y el terrorismo siguen siendo elevados”.
En Latinoamérica, Venezuela es el único país con una calificación de “muy alto riesgo”. Esto se debe a que sigue teniendo elevados indicadores de riesgo en todos los ámbitos, particularmente altos en intercambios de transferencia, legal y reglamentaria.
Señalan los expertos en análisis que los precios del petróleo han fortalecido la capacidad del gobierno venezolano para cumplir con sus pagos de la deuda, sin embargo, las cuentas fiscales han empeorado significativamente desde 2012 y la voluntad de pago permanece en alto riesgo.
Con calificación “alto-medio riesgo” está Paraguay, lo sigue Bolivia que se encuentra en “alto riesgo político” posición que ocupa junto a Argentina y Ecuador, y en las medidas con menor riesgo están Colombia y Perú con “riesgo medio” y finalmente Brasil y Uruguay que son considerados países de “poco riesgo”.