El proyecto sobre las circunscripciones especiales de paz será votado hoy por la plenaria del Senado. Estas son zonas especiales y transitorias que se ubican en 16 territorios golpeados por el conflicto armado para asignarles igual número de curules en el legislativo durante dos periodos. Pero la coalición de gobierno está dividida entre quienes apoyan la creación de esas circunscripciones y quienes las impugnan, al considerarlas inoportunas e inconvenientes.

El senador Roy Barreras explicó que “una de las ventajas de este proceso de paz es que al fin el Estado va a llegar a esos territorios que ahora están en paz porque las guerrillas están concentradas y dejando las armas. Esos colombianos, la mayoría de ellos campesinos, víctimas y desplazados, que no han tenido voz para hacer oír su justo reclamo, ahora tendrán voz”.

Sostuvo el parlamentario que “por eso en La Habana acordamos, como una medida de reparación para las víctimas, la creación de estas 16 circunscripciones especiales para la paz, en las que no podrán participar los partidos políticos tradicionales ni las Farc. Son para las víctimas”.

Entre tanto el senador José Obdulio Gaviria, el mayor opositor al proyecto dijo que “este proyecto, en un postre servido como el acuerdo, las 310 páginas, que son páginas de literatura farosa,  es la cerecita, con él cierran todo este episodio y es la creación de 16 jurisdicciones para elegir 16 representantes en un escenario favorable total y absolutamente para las Farc. Incluso lo disfrazan con el tema gremialista”.

El Senador del Centro Democrático señaló que “en todas esas zonas hay presencia de los partidos políticos, en todas esas zonas hay presencia de la civilidad”.

¿Habrá vicio?

Por dudas de varios congresistas, la plenaria del Senado tuvo que aplazar la discusión de una reforma constitucional estudiada por fast track que busca crear las nuevas circunscripciones para que las zonas más apartadas del país tengan representación en el Congreso.

Sin embargo, varios senadores advirtieron que esta maniobra pudo haber viciado el resto de iniciativas que se votaron, ya que la Constitución establece que los proyectos de implementación de los acuerdos de paz no solo tienen prioridad en el orden del día, sino que tienen que discutirse y votarse primero que todos los demás.

El senador Armando Benedetti advirtió que “la plenaria no está por encima de la Constitución y todos los proyectos que se hayan votado están viciados. Queda muy claro que no se puede tocar ningún proyecto de ley ni nada que no sea del fast track hasta que se decida sobre el proyecto en cuestión y hoy no se decidió nada”.

La misma tesis tiene el senador Carlos Fernando Motoa, presidente de la Comisión Primera, quien advirtió que habría demandas de inconstitucionalidad en contra de varios proyectos.

“Es absolutamente claro que los proyectos de paz tienen absoluta prelación y no se podrá someter ningún otro asunto mientras no se resuelva ese proyecto en la Cámara o Comisión respectiva”, manifestó.

Dijo que “el proyecto fue aplazado, la plenaria del Senado no puede desconocer un artículo constitucional y yo sí creería que los proyectos que se aprobaron en esta sesión tiene vicio de inconstitucionalidad”. 

El senador José Obdulio Gaviria leyó textualmente lo que establece el acto legislativo por la paz en su artículo 1, numeral B:

 “Los proyectos de ley y de acto legislativo tramitados mediante el procedimiento legislativo especial para la Paz tendrán trámite preferencial. En consecuencia tendrán absoluta prelación en el orden del día sobre cualquier otro asunto, hasta tanto la respectiva Cámara o Comisión decida sobre él”, manifestó.

Sin embargo, el presidente del Congreso, Mauricio Lizcano, respondió y negó que la actuación de toda la plenaria se haya viciado.