Chismes y apodos, principio del bullying | El Nuevo Siglo
Sábado, 21 de Septiembre de 2013

Las peleas en la época escolar son de toda la vida pero en estos tiempos de las telecomunicaciones se conocen con pelos y señales por su amplia difusión. Los casos entre los jóvenes que se agreden dejan estupefacto a la sociedad pero como en Bogotá y algunas regiones del país desde hace unos años las peleas se han convertido en común denominador, el sector público y privado se han unido para frenar el mal llamado bullying o matoneo.

Mientras la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) realiza el programa Hermes y forma conciliadores escolares de colegios distritales por intermedio del Centro de Arbitraje y Conciliación, el concejal Celio Nieves, del Polo Democrático, profesional de la pedagogía, decidió apostarle al proyecto de crear el Observatorio de Convivencia Escolar que hoy es un acuerdo de la ciudad.

Según la directora del programa Hermes, Patricia Rico, uno de los motivos es la transición entre primaria y secundaria, porque se presentan cambios fuertes para los niños y comienzan las rivalidades entre grupos, diferencias por la influencia de la moda, y la autoridad, propios de su desarrollo sicosocial. De los 96.000 conflictos que ha atendido el programa el 41 por ciento corresponde a este rango de edad.

La mayoría de conflictos que llegan al programa se presentan por chismes (34.600) y por apodos (18.900). Los estudiantes aseguran que caerse mal, intromisión, juegos, intolerancia, engaños y bromas también son detonantes del matoneo escolar.

El 61 por ciento de los conflictos se presentan en el salón de clase y el 33 por ciento en el patio de recreo.  El 1 por ciento  fuera del colegio. Comienza a evidenciarse además la presencia de conflictos en redes sociales con 193 casos que representan el 1 por ciento.

El programa de Conciliación Escolar Hermes cubre 300 colegios de Bogotá que representan el 67 por ciento de establecimientos educativos de la capital. A la fecha la CCB ha sensibilizado a cerca de 3.000.000 de personas de la comunidad educativa. En 2012 se realizaron 892 jornadas de conciliación en los colegios.

El programa para la gestión del conflicto escolar es una propuesta innovadora que rompe con el esquema de educación tradicional y da a los estudiantes y a los padres y madres de familia un papel central en el manejo de situaciones conflictivas; además de reconocer que los maestros y las directivas de las escuelas también pueden ser una fuente de conflicto.

Los estudiantes que han acudido a la conciliación como alternativa de solución al conflicto han logrado 95 por ciento de acuerdos satisfactorios.

 

Observatorio

 

Desde 2008, Nieves decidió apostarle al proyecto de Observatorio de Convivencia Escolar, pero algunos miraron el proyecto como algo intrascendente.

Hasta el momento las instituciones educativas del Distrito hay desconocimiento de la norma y del Decreto 546 de 2011 que lo reglamenta y dos años después de expedido el acuerdo capitalino y contando con un instrumento útil e idóneo se ha dejado pasar el tiempo y no se aplican los criterios esbozados en la norma.

Las sutiles formas de intimidación apenas se están descubriendo y son tan variadas como inverosímiles, desde la simple amenaza hasta el mejor elaborado delito extorsivo que en pasados años han llevado a jóvenes al suicidio frente a sus propios compañeros y hasta al homicidio contra el rector Jaime Rojas, de un colegio en Ciudad Bolívar a manos de un estudiante, lo que evidencia que el problema es mucho más serio que un simple acoso, es un muy bien elaborado acorralamiento del sistema que ha sido incapaz de hacer una reflexión de la escuela como escenario de convivencia y de solución de los conflictos.

Por lo general los casos tienen un denominador común: Familias disfuncionales que son alertas tempranas, deben ser tenidas en cuenta y se pueden evitar bajo un serio diagnóstico profesional, desenlaces fatales que además están poniendo en jaque, no solo a autoridades escolares, sino que atentan contra la seguridad ciudadana, sin olvidar casos tan estudiados como la Masacre de Columbine, perpetrada por Eric Harris y Dylan Klebold en 1999 donde estos estudiantes armados mataron a 13 personas, hirieron a 24 y luego se suicidaron.

Para los expertos, no se puede culpar a la escuela pero se debe dotarla de mecanismos que acompaña a los estudiantes, docentes y comunidad educativa para que promuevan la convivencia pacífica.

 

 

Doce años formando conciliadores escolares

 

Desde 2001, la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) lidera propuestas innovadoras para el manejo del conflicto en diferentes contextos entre ellas en el ámbito educativo con el Programa Hermes para la gestión del conflicto escolar.

En 360 instituciones educativas de Bogotá y Cundinamarca se adelanta el Programa Hermes, perteneciente al Plan Educa del Centro de Arbitraje y Conciliación de la CCB, que como propuesta metodológica:

·       Brinda herramientas y desarrolla habilidades y competencias sociales en la comunidad educativa (a padres y madres de familia, docentes y estudiantes) para atender de manera pacífica el conflicto escolar

·       Previene el escalonamiento del conflicto en la escuela.

·       Promueve la protección de los derechos humanos desde sus premisas fundamentales “Valoración de la diferencia y respeto por el otro como ser humano, la paz, la reconciliación, la justicia y la paz”, a través de los Mecanismos Alternativos en solución de conflictos”.

Además, atiende, bajo la figura de la Conciliación, conflictos interpersonales entre estudiantes que generalmente se presentan por “chismes y apodos”, seguidos de otros como: “caerse mal”, celos, intromisión en juegos, intolerancia, engaños y bromas.

 

 

Nueva Ley de Convivencia Escolar

 

Con la entrada en vigencia de la Ley 1620 de 2013 o Sistema Nacional de Convivencia Escolar y Formación para el Ejercicio de los Derechos Humanos, la Educación para la Sexualidad y la Prevención y Mitigación de la Violencia Escolar, el Plan Educa del Centro de Arbitraje y Conciliación de la Cámara de Comercio de Bogotá continuará trabajando por promover el uso de los medios alternativos de solución de conflictos como la conciliación/mediación.

El Plan Educa trabaja en establecido por esta Ley. En primera instancia, hace parte de la estructura del sistema (de manera informal), teniendo en cuenta que la Ley invita a las instituciones educativas y Secretarías de Educación para que logren el apoyo de entidades privadas, como estrategia de gestión en temas convivenciales. Este acompañamiento lo viene realizando desde hace más de doce años, como una propuesta de largo plazo tendiente a cambiar una cultura inadecuada en la resolución de conflictos.

Esta Ley resalta la participación de los estudiantes en toda la planeación y ejecución de planes de intervención de la convivencia. Desde el inicio, el Plan Educa se pensó como una estrategia de intervención de los estudiantes para los estudiantes, donde los pares con su mirada y visión deberían realizar una resolución de conflictos adecuada, confiable y creíble para esta población que en muy pocas oportunidades nos permitimos, escuchar o dejar gestionar.

Se identificó un objetivo común entre la Ley y el programa Hermes de la CCB, al buscar una formación integral de los educandos, visto como una propuesta pedagógica de carácter flexible, que brinda herramientas y desarrolla competencias sociales en los jóvenes, para la transformación del conflicto escolar a partir de los Métodos Alternativos de Solución de Conflictos (MASC), donde se fortalece la educación para la paz, reconociéndolos como sujetos activos de Derechos.

El día de hoy se necesita comprender como se presenta la conflictividad, la dinámica relacional, en nuestros centros educativos. La Ley de convivencia busca reconocer este aspecto por medio de la evaluación del clima escolar. El Programa Hermes realiza jornadas de conciliación y sus resultados son entregados regularmente como insumo de análisis y diagnóstico de las dinámicas de conflictividad más frecuentes en las instituciones donde acompañamos con nuestro programa.

 

Desterrar prácticas….

 

Después que en las pasadas elecciones se escogieran 2.281 nuevos personeros estudiantiles en todos los colegios de Bogotá, algunos con voto electrónico, la principal misión es disminuir la violencia.

El personero Ricardo María Cañón ha sostenido que en el nuevo esquema de ciudad su principal propósito es sembrar en los jóvenes, padres y maestros de Bogotá la semilla de la reflexión y el respeto por las diferencias a través del cumplimiento de los Derechos y Deberes.

Según los 8.000 candidatos a Personero Estudiantil de las últimas elecciones sus principales desafíos son desterrar la práctica del matoneo, desestimular las pandillas y promover la tolerancia en el ámbito escolar.

 

 

La Convivencia: La Meta

 

Celio Nieves Herrera*

Especial para El Nuevo Siglo

 

"La raza humana se encuentra en la mejor situación cuando posee el más alto grado de libertad". Alighieri, Dante.

Constantes editoriales e informes de prensa muestran algunos fenómenos de violencia en la escuela, no obstante el abordaje de este tema por los medios de comunicación bien daría para una reflexión. Preguntas válidas al respecto: ¿realmente la escuela es el epicentro de la violencia? o ¿será mejor que la escuela es el reflejo de la sociedad?

La sociedad vive un constante bombardeo de las “maravillas” que nos propone la modernidad y ello deja muy poco espacio para la reflexión personal y familiar, dejamos de lado un buen tiempo de diálogo con nuestros hijos por las noticias, las novelas o la internet.

La constante soledad que viven los menores de hoy los aleja de la convivencia y como respuesta a ello algunos sectores y personalidades proponen hasta penas de cárcel para el menor infractor, garantizando su resocialización. De darle razón a tan insólita propuesta nos estaríamos dando por vencidos muy rápido.

No podríamos reivindicar de manera alguna regresar a los métodos medievales dado que la escuela considerada antiguamente como una especie de castigo, fue evolucionando hasta convertirse en el centro de la cultura, socialización, expresión y desarrollo. Hoy la escuela es el “receptáculo” de todos los males de la sociedad y por ello la miramos con sospechosa perversión.

Cuando los tiempos de los educandos están siendo tan absorbidos y con distractores tan fuertes como la televisión y los medios, las posibles soluciones deben expresarse y exponerse con claridad, ellos requieren respuestas que la escuela está en capacidad de brindar pero que la voluntad política ha querido ocultar estratégicamente.

La escuela no adiestra, educa en el contexto de una vida social, comunica, interacciona, pues la sociedad es un sistema de instituciones en las que se verifican relaciones socio culturales y humanas que anuncian unas pautas a los individuos y la educación es el proceso de prepararlos para que encajen correctamente en esa complicada estructura social y desempeñen papeles sociales particulares. Durkheim definió la educación “como la acción de una generación sobre otra para adaptarla a las pautas de conducta establecidas, es decir un fenómeno típicamente generacional”.

Como un aporte del hoy acuerdo de la ciudad No. 434 de 2010 de mi autoría se creó el “Observatorio de Convivencia Escolar” como un espacio de reflexión pedagógica, con el objeto de incentivar la investigación y el diseño de estrategias encaminadas a prevenir situaciones de violencia escolar en las Instituciones Educativas Públicas y Privadas del Distrito Capital. Una tarea pendiente de la escuela con sus directivos y docentes es la de trabajar por erradicar la violencia, para que el propósito sea asumir la convivencia y resolución de conflictos como un objetivo de la sociedad.

*Concejal de Bogotá.