Centroamérica debatirá vías alternas a guerra antinarco | El Nuevo Siglo
Miércoles, 7 de Marzo de 2012

 

Los presidentes de Centroamérica acordaron analizar vías alternas de lucha contra las drogas, incluida la despenalización, este martes en una cumbre en la que el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió más ayuda para la guerra frontal al narcotráfico.

La cumbre estuvo marcada por la polémica propuesta que presentó el presidente de Guatemala, Otto Pérez, de abrir un debate que "vaya más allá" de la despenalización de la droga -rechazada por Estados Unidos-, para "encontrar otras formas" de combatir el narcotráfico más eficientemente".

"Escuchamos con atención e interés la propuesta del presidente de Guatemala" y convenimos que (...) continuaremos el debate" en  Guatemala el 24 de marzo, anunció el gobernante hondureño Porfirio Lobo, luego de que los centroamericanos se reunieron en privado, tras las pláticas con Biden.

Tras reunirse con los mandatarios de la región en la Casa de Gobierno en Tegucigalpa, Biden dijo que la administración de Barack Obama gestiona 107 millones de dólares ante el Congreso para apoyar una estrategia de seguridad regional.

Durante el encuentro conjunto Biden dijo estar de acuerdo con un "abierto y genuino debate" siempre y cuando "se analicen los procedimientos y los posibles resultados", según un nota oficial sobre las incidencias de la reunión.

"No se pueden desperdiciar recursos si no se van a lograr resultados concretos, se tienen que focalizar los recursos para estrategias y programas integrales contundentes", agregó Biden.

Los presidentes de Centroamérica optaron por el debate, pese a que algunos rechazan abiertamente la despenalización.

"Aunque no es una medida que mi gobierno respalde (...) soy de la opinión que debe ser analizada técnicamente, despojada de consideraciones políticas e ideológicas", dijo el salvadoreño Mauricio Funes.

Estados Unidos propugna una lucha frontal que se paga con decenas de miles de muertos en México y Centroamérica, por donde pasa cerca del 90% de la cocaína consumida en aquel país.

Tras la ofensiva que emprendió el gobierno mexicano de Felipe Calderón, que en un lustro dejó unos 50.000 muertos, los cárteles de la droga han desplazado sus operaciones a Centroamérica y, aliados con las violentas pandillas locales, siembran el terror.

Hoy la región es la más mortífera del mundo, sobre todo en su llamado "triángulo norte". Honduras registra una tasa de 85 homicidios por cada 100.000 habitantes, El Salvador 65, y Guatemala 41, según datos de la ONU.

La violencia en esos países es peor que la de México (cuya tasa de homicidios es de 18 cada 100.000 habitantes) y su respuesta ha sido militarizar la seguridad pública.

"Esta no es una batalla exclusiva de Centroamérica" y es la región "que está poniendo los muertos", manifestó la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla; y su colega de Nicaragua, Daniel Ortega, dijo no ver en la comunidad internacional "una preocupación que se manifieste en acciones"./Afp