El pedido de extradición de siete colombianos acusados de asesinar a un agente del departamento antidrogas de Estados Unidos (DEA) en junio pasado está en manos de la Corte Suprema de Justicia, que tiene cinco meses para pronunciarse, informó el organismo.

El Ministerio de Justicia envió al estudio del máximo tribunal de la justicia colombiana las solicitudes de extradición de las siete personas que según las autoridades están comprometidas en el caso del estadounidense James Terry Watson, apuñalado el 21 de junio en Bogotá durante un intento de asalto.

"Las solicitudes para el estudio de la Corte llegaron el 26 de agosto y la corte tiene un plazo de 4 a 5 meses para decidir", dijo a la AFP un vocero de la Corte sin suministrar más detalles.

Si la Corte autoriza las extradiciones, el presidente Juan Manuel Santos tendrá la última palabra sobre la entrega de los imputados a la justicia estadounidense, en un procedimiento que se cumple frecuentemente con narcotraficantes, principalmente.

El agente de la DEA, que llevaba tres años trabajando en Colombia, murió tras ser apuñalado en un taxi en Bogotá, cuando aparentemente era víctima de un secuestro exprés.

Tanto las autoridades estadounidenses como las colombianas atribuyeron el hecho a un acto de la delincuencia organizada, y no a sus actividades como funcionario de la agencia antidrogas.

Watson había trabajado para la DEA durante los últimos 13 años en Hawai, Puerto Rico y Afganistán. Casado recientemente con una colombiana, el agente estaba destacado en Cartagena (800 km al norte de Bogotá) y se encontraba en Bogotá en una misión temporal.AFP