Esta semana se hará oficial el listado de medicamentos que serán sometidos a control de precios por parte del Gobierno Nacional, y que representarán un ahorro anual de 90 mil millones de pesos.

El listado se encuentra en consulta pública para que los diferentes actores del sistema de salud hagan los comentarios que consideren pertinentes, según lo informó el Ministerio de Salud recientemente.

Según el Ministro de Salud, Alejandro Gaviria Uribe, y tal como lo publicó EL NUEVO SIGLO, son alrededor de 900 presentaciones comerciales que representan un ahorro que está alrededor de  los 90.000 millones anuales de pesos, adicionales al ahorro por los otros medicamentos que ya tienen control en su precio.

“En esta regulación tenemos pocos principios activos, pero muchas presentaciones comerciales, porque estamos regulando mercado donde existe competencia, entre los medicamentos  más importantes se encuentran los factores 8 (medicamento contra la hemofilia)”, aseguró Gaviria.

Se espera que esta semana se expida la Circular que oficializa el nuevo listado de medicamentos a los que se les controlará el precio.

Justamente el jefe de la cartera ministerial aclaró la semana pasada en la rendición de cuentas, que durante 2013, el Ministerio de Salud ahorró cerca de $400 mil millones para la salud de los colombianos, con una medida efectiva sobre el control de precios de nueve mil medicamentos.

“De la liberación se pasó a un control de precios según las condiciones de mercado y los datos internacionales. Los distintos actores de la cadena deben reportar los precios y las cantidades transadas en el Sistema de Información de Medicamentos- Sismed”, dijo.

Es así que el 18 de diciembre de 2013, y por segunda vez en el año, el Gobierno Nacional aplicó la metodología de referenciación internacional de precios de medicamentos, con lo que fija topes a los precios de 334 productos farmacéuticos.

El Presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón, explicó que esta medida significa una reducción de hasta 40%, lo que genera un ahorro que puede alcanzar los $200.000 millones anuales.

De otro lado, el Ministerio de Salud y la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) anunciaron en su momento el intercambio de experiencias sobre la regulación de los gastos farmacéuticos en materia de medicamentos.

Cabe recordar que el 17 de febrero, la Asociación de Industrias Farmacéuticas Colombianas (Asinfar) indicó que América Latina, África y algunos países de Asia se están convirtiendo en consumidores pasivos de medicamentos, con el agravante de que estos son exportados desde las economías desarrolladas.

“Somos importadores pasivos de fármacos (en Latinoamérica) no producimos nada”, señala con angustia el panameño Ibis Sánchez Serrano, quien inició estudios de medicina en su país pero terminó investigando sobre genética en Estados Unidos y haciendo otras especializaciones en Francia e Italia.

Para este experto, si se quiere acabar con esa dependencia no queda otro camino que luchar contra ella mediante el diseño de políticas públicas que se vuelquen hacia la innovación, conocer más sobre las enfermedades que aquejan a la población del trópico, como la colombiana, y desarrollar medicamentos más eficaces y seguros.

Para ello resulta crucial la competencia y la creación de condiciones propicias para que ella se desarrolle y los precios bajen facilitando el acceso de las personas a los medicamentos.

“Hay que enfocarse agresivamente en la innovación y el desarrollo de la industria farmacéutica de innovación como activo económico de la sociedad”, reclama Sánchez, quien enfatizó en que los altos precios de los medicamentos, principalmente biotecnológicos, en Colombia y en todo el mundo han llevado a la crisis que hoy enfrentan los sistemas de salud.