Conservadores, liberales y uribistas de Medellín tienden a la unanimidad para opinar que carecen de éxito las maniobras ejecutadas desde la administración local pretendiendo damnificar a Luis Pérez Gutiérrez, aspirante a la reelección. Los agravios, muy calumniosos, urdidos contra Pérez no parecen llevar electores al candidato liberal Aníbal Gaviria, con quien simpatiza el burgomaestre Alonso Salazar. Al contrario, le restan votos según decires entre observadores políticos de la capital paisa.
“Cielito lindo”
William Calderón, cronista político e hijo renombrado de Neira, Caldas, mantiene una nada común apreciación acerca del Conservatismo, en las elecciones anunciadas para el 30 de este mes. Angustiado, opina que su Partido quizás no aumentará votación. Culpa a lo que llama estilo "cielito lindo” con “hermoso lunar” cerca de la boca. En vano, le he solicitado que traduzca estas locuciones a jerga caldense, bogotana o payanesa, mencionando nombres de personas si fuese necesario. Más elude hacerlo escondiéndose en irónica risotada.
Ley sin fin
Podrían no tener fin, antes de promediar la actual centuria, las indemnizaciones a dos millones de “víctimas de la violencia” desde 1995, ordenadas por reciente y controvertida ley. Esta presunción se basa en la partida de $ 40.000 millones que sería en 2012 el primer desembolso anual autorizado en la Ley Nacional de Presupuesto. La tradición colombiana hace suponer en ese cuerpo de normas un semillero sin límite de demandas contra la Nación.