Gracias al crecimiento de 4,3 por ciento de 2013, la economía colombiana se dirige ahora hacia la meta del 5 por ciento. ¿Pero en cuánto tiempo logrará esta cifra el país para llegar al club de los países con mayor PIB?

Al analizar el rumbo que tomó la economía el año pasado y lo que puede suceder en los próximos meses, se debe tener en cuenta que mientras que en la primera mitad del 2013 el PIB sólo creció 3,3%, en la segunda parte del año  la variación aumentó a 5,2%.

Esta dinámica confirma el proceso de recuperación que se está consolidando en el país y alimenta las expectativas positivas para este año. El buen comportamiento de la construcción y del consumo privado fue el determinante clave para la aceleración de la actividad. Mientras tanto, las importaciones  presentaron el incremento más moderado.

Por sectores, la industria y la minería tienen retos importantes para los próximos trimestres, si bien hay un buen potencial para las exportaciones manufactureras con un tipo de cambio en niveles más competitivos. Esto hará que el balance sectorial en 2014 sea más equilibrado.

Con todo, los analistas pronostican que por lo menos para este año el crecimiento no llegará al 5 por ciento.

Proyecciones

La analista del BBVA, Juanita Téllez, señala en un informe que “mantenemos nuestra proyección de 4,7% para 2014, enfatizando en las dinámicas diversas al interior del año: la construcción y el consumo privado liderarán el crecimiento del primer semestre y las exportaciones y la inversión privada no residencial apalancarán la expansión a partir de julio”.

En su análisis privado, la entidad financiera sostiene que “en 2014 tendremos dos tendencias: construcción y consumo privado liderarán el crecimiento del primer semestre y exportaciones e inversión privada no residencial apalancarán la expansión a partir de julio”.

Haciendo una simulación con el juego del ajedrez, el informe indica que si los factores de crecimiento se comportaran como un juego de ajedrez, la ficha rey del primer semestre sería el sector de la construcción. Todos los esfuerzos de los demás integrantes del juego tienen que estar enfocados en materializar las buenas perspectivas del sector para 2014, tal como se logró el año pasado.

“El Gobierno deberá mantener un nivel de ejecución récord de las obras civiles y entender que estas tareas no pueden depender de los períodos electorales ni de los compromisos con la campaña política. A su vez, el sector privado debe convertir las licencias de construcción en obras efectivas, pues entienden que la demanda por vivienda se mantiene elevada gracias a los apoyos públicos en tasa de interés y cuota inicial”, aseguran los expertos.

Asimismo, la reina de este juego será el consumo privado. Es el acompañante ideal de la aceleración del crecimiento en el primer semestre. Además, un acompañante necesario, pues no todo el crecimiento debe depender de la inversión en construcción. El papel del consumo será reflejar la fortaleza de la demanda privada y que sirva para conformar una dupla ganadora junto con la construcción.

Indica el BBVA haciendo el símil del fútbol que “en los laterales y haciendo diagonales, también como cuando un delantero busca el gol y se muestra para un pase profundo, preparando la puntada final, estarán la inversión en maquinaria y equipo y las exportaciones, nuestras torres y alfiles del juego”. La inversión será lograda gracias a la recuperación manufacturera, esta última consolidada en la segunda mitad del año.

Y las exportaciones tendrán una aceleración gradual, apuntalada en el segundo semestre de 2014, como resultado de los mejores resultados en los países desarrollados en plena recuperación económica.

Estos dos componentes serán esenciales para proteger al rey y la reina cuando éstos tengan menor capacidad de expansión: reducción de subsidios de tasas a la clase media compradora de vivienda nueva e incremento de las tasas de interés por parte del Banco de la República. Finalmente, el peón será el consumo público, será el de camino más lento, avanzando posición por posición.

Asimismo, el cumplimiento de la meta de la regla fiscal, a pesar del ciclo económico-político de este año, exigirá un ajuste del gasto gubernamental, así sea después de la definición de la contienda electoral. Sólo si las demás fichas están en peligro de jaque, los peones pasarán al frente y harán una tarea más exigente.

En total, la puntuación de nuestro juego deberá dar como resultado una victoria. Una victoria en la cual el crecimiento de 2014 terminará en 4,7%, gracias a las dos dinámicas del crecimiento durante el primer y segundo semestre. Incluso, la partida del juego para 2015 mostrará un dinámico 5,1% de crecimiento ese año. El Gobierno

El Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, destacó la tasa de crecimiento económico de Colombia durante 2013 de 4,3% y de 4,9% en el cuarto trimestre, ubicándose como la segunda mejor de América Latina.

Señaló que la economía colombiana sobresalió en la región “gracias a la ejecución de políticas como el Plan de Impulso a la Productividad y el Empleo (PIPE) que fueron oportunas para revertir la desaceleración de la economía a comienzos del año pasado”.

El Ministro Cárdenas mencionó el buen resultado del sector agropecuario con una tasa del 5,2% en 2013, la más alta en los últimos 23 años (6,6% en 1990).
Además dijo que el sector de la construcción creció un 10% como resultado de las políticas anticíclicas lideradas de manera efectiva y oportuna. “Gracias a ello Colombia ocupó el decimosexto lugar entre 75 países que ya han reportado sus cifras económicas”.

Según el Ministro, la inversión pública batió récord en 2013 con un total del 27,7% del PIB, “garantía de las altas tasas de crecimiento en los años venideros”.
“En el segundo semestre del año pasado el crecimiento fue del 5,2%, es decir, recuperamos nuestra tendencia para favorecer la equidad entre los colombianos. Las intervenciones fueron todas muy efectivas, especialmente en materia de vivienda y en obras civiles que sirvieron para jalonar al resto de la economía”, concluyó.

La infraestructura

De acuerdo con Juan Martín Caicedo Ferrer, Presidente Ejecutivo de la Cámara Colombiana de Infraestructura, CCI, los resultados sectoriales confirman el éxito de la política de vivienda que viene implementando el Gobierno del Presidente Santos, así como los aciertos que la ministra de Transporte, Cecilia Álvarez Correa, ha tenido al acelerar la ejecución de los proyectos de infraestructura que se están adelantando actualmente en el país. "Sin duda uno de los factores decisivos fue la entrega de dobles calzadas de las concesiones vigentes” afirmó el Presidente de la CCI.

Según el dirigente gremial, los resultados económicos se explican, entre otras razones, porque hoy el sector transporte registra niveles de ejecución presupuestal muy superiores a los de hace algunos años. Según cifras del Ministerio de Hacienda, en 2012 el sector transporte alcanzó una ejecución de 94% cuando en 2010 esta cifra tan solo alcanzaba el 76%. Este hecho confirma la hipótesis que el gremio siempre ha defendido: "no hay mejor aliado para el crecimiento económico que la inversión en infraestructura”.

Caicedo Ferrer también recalcó el rol que ha jugado la ingeniería colombiana en el buen desempeño de la construcción. "No cabe duda que el sector, en cabeza del Ministerio de Transporte, se ha encontrado en la ‘Ruta de la Ejecución’ con empresas de ingeniería a las que se les puede mirar a los ojos y que resultan ser las mejores aliadas en el propósito de cumplirle al país con más y mejor infraestructura”.

Edificaciones

En materia económica, 2013 fue el año del sector edificador colombiano, así lo reflejan los resultados publicados hoy por el DANE, en los que el PIB en edificaciones creció 9.2% en 2013.

“El impacto sobre la cadena de valor y el empleo nos da la satisfacción de ser una de las locomotoras del desarrollo del país, así como de cumplir con los objetivos de política económica y social”, afirmó la presidenta Ejecutiva de Camacol, Sandra Forero Ramírez, al conocer los resultados del DANE.

Para el Gremio, este resultado es la suma de condiciones necesarias, pero no suficientes, para que el dinamismo del sector sea sostenible, y es aquí donde se le debe apuntar a la implementación de estrategias de largo plazo.

En efecto, los programas de vivienda social, los incentivos de acceso al crédito y los factores macroeconómicos favorables como el empleo y la inflación, han sido componentes fundamentales; sin embargo es necesario trazar metas que apoyen la actividad en materia de habilitación del suelo, acceso a servicios de agua potable y saneamiento básico, entre otros.

“Un sector  que inyecta más de 25 billones de pesos de inversión privada a la economía mantiene más de 1.3 millones de empleos directos y 1.8 millones indirectos, y crece el doble del país, debe ser impulsado integralmente”, concluyó la Dirigente Gremial.

Para la Presidenta de Camacol, no se puede garantizar el crecimiento sostenido del sector, si aun teniendo las condiciones de mercado y los instrumentos de política necesarios, se desincentiva la iniciativa privada por transgresiones jurídicas que afectan las decisiones de inversión de los  empresarios, o por las contravenciones sobre los derechos legítimos que recaen sobre la actividad. Se requiere tener estabilidad jurídica.

También afirmó que si bien los indicadores muestran que el sector va muy bien, parecería que se quiere poner en riesgo su dinamismo, imponiendo reglamentos sobredimensionados que sin medir el impacto, la pertinencia y oportunidad de su  incorporación terminan afectando el desempeño del sector.

 

Buena nota

JP Morgan, JPM, acaba de dar a Colombia un espaldarazo como destino de inversión extranjera de portafolio. Este banco de inversión tiene índices dedicados a deuda soberana en mercados emergentes. Colombia hace parte de esos índices, y el anunciado aumento de la participación del 3% al 8% convierte al país más atractivo para los inversionistas extranjeros.

Sin duda este voto de confianza responde a la realidad económica interna, pero también a que el país ha sabido blindarse frente a las coyunturas externas, de allí que hoy sea visto como estrella dentro de las economías emergentes.

 

 

Revisiones al alza

Según el director de investigaciones de la firma Credicorp Capital, Daniel E. Velandia, “es del todo relevante destacar que, bajo la serie inicial, un crecimiento de 5.5 por ciento habría sido necesario para alcanzar un 4.3 por ciento en el año completo, lo que justificaba nuestro optimismo. Sin embargo, el DANE realizó importantes revisiones a los datos anteriores que explican, en su mayor parte, nuestra desviación en la estimación del dato correspondiente al cuarto trimestre”.

En general, la información reportada es ampliamente favorable considerando que, i) el dato observado del cuarto trimestre se constituyó en la tercera sorpresa consecutiva al alza para el consenso del mercado; ii) el crecimiento del año completo se compara muy favorablemente con las estimaciones registradas hace siete meses, teniendo en cuenta que el consenso del mercado esperaba un 3.8% en agosto pasado, cifra que representó el pronóstico más bajo de todo el año y que fue explicada por un bajo desempeño de la economía en el primer semestre; iii) el crecimiento de 2013 implicó una aceleración frente al 2012, cuando el PIB se expandió un 4.0% (revisado a la baja desde 4.2%), lo que resulta destacable considerando la compleja coyuntura externa; y iv) la demanda interna crece a tasas elevadas.

De acuerdo con lo anterior, el DANE revisó al alza las cifras de crecimiento tanto del segundo trimestre como del tercer trimestre del 2013, pasando de 3.9% a 4.0% anual y de 5.1% a 5.4% anual, respectivamente.

Para el año completo, los mayores crecimientos desde el lado de la oferta se presentaron en construcción (9.8%), actividades de servicios sociales, personales y comunales (5.3%) y agricultura (5.2%), consistente con la mayor ejecución de gasto público tanto social como en infraestructura en medio de un año pre-electoral, el buen desempeño del sector inmobiliario y el incremento en la producción de café (22.3%).

Por el lado de la demanda, el consumo de los hogares, el gasto del Gobierno y la inversión, registraron mayores tasas de crecimiento frente a 2012, por lo que la demanda interna se aceleró de 4.6% a 4.9%. Por su parte, tanto las exportaciones como las importaciones se desaceleraron.