Alias “Guacharaco” se había convertido en el último máximo jefe al frente de la temida banda criminal “Renacer”, encargada de coordinar el narcotráfico desde el litoral pacífico hacia diferentes países de Centroamérica, utilizando rutas marítimas desde los municipios de Pizarro y Bahía Solano donde disponía de un esquema de seguridad de entre 15 y 20 hombres encargados de las actividades ilícitas y de custodiar las rutas de la coca.
Peñata Torres ordenó la tortura y asesinato de 12 personas en el departamento, en su mayoría pescadores de la región, durante los años 2009 y 2012 y se había convertido en el verdugo de cerca de 350 familias que fueron obligadas al desplazamiento forzado de los corregimientos de Togoramá, Charambirá y Pichimá.
Historial delictivo
Alias “Guacharaco” lideró una guerra a muerte con la banda criminal de “Los Rastrojos” por el control de las rutas del narcotráfico, la trata de personas y otras actividades ilícitas en el Bajo Baudó.
Su organización delictiva había logrado imponer el control de un emporio criminal en los municipios de Itsmina, Quibdó, Condoto, Tadó y Medio Baudó que iba desde el cobro de extorsiones a empresarios y comerciantes de la región hasta liderar los cultivos de hoja de coca para la producción de clorhidrato de cocaína.
La Interpol había emitido el pasado 15 de enero de 2013 una circular roja en contra de Peñata Torres por el delito de concierto para delinquir. Junto a alias “Guacharaco” también fueron capturados dos hombres pertenecientes a su esquema personal de seguridad que fueron identificados como Franklin Valencia alias “Verdugo” y José Martínez alias “Chunco”.