LA situación socioeconómica es el mayor argumento esgrimido por los colombianos para no tener hijos. Sin embargo hay otras causas como la realización profesional y los proyectos financieros que han determinado que las parejas “adopten” esa posición, no ser padres, como decisión de vida y así cada día es mayor el número de personas en esa línea.
Con el objetivo de medir la temperatura de las familias colombianas sobre los principales temas que influyen sobre ella, el Instituto de la Familia de la Universidad de La Sabana llevó a cabo durante una semana la aplicación de la encuesta “el Termómetro de La Familia en Colombia”, iniciativa promovida originalmente por el Instituto Internacional de Estudios sobre La Familia en España –The Family Watch- que lleva aplicando anualmente el Barómetro de la familia en este país desde hace 6 años.
La versión para Colombia del Termómetro de la familia integró de 24 preguntas para quienes tenían hijos y 22 preguntas para quienes no los tenían, las percepciones personales sobre el nivel de bienestar familiar, la tenencia de hijos y su crianza, la comunicación familiar, la protección jurídica, el acceso a servicios públicos y la armonización de la realidad familia- trabajo.
¿Los colombianos quieren tener hijos?, Si ya tienen ¿Desean más?, ¿Cómo evalúan su condición socioeconómica para tomar esta decisión?, ¿Qué piensan de la protección jurídica de la familia, la maternidad y la paternidad? y ¿Cómo perciben su acceso a los servicios públicos? Estas fueron, entre otras, otras, las preguntas que hizo el Instituto de la Familia de la Universidad de La Sabana a 1.527 personas, mayores de edad, habitantes de las principales regiones del país.
Los resultados del sondeo revelan que el 59% de los encuestados no quiere tener hijos o quiénes ya los tienen no desean más. Según Diana Muñoz, profesora del Instituto de La Familia de la Universidad de La Sabana, “este resultado está relacionado, entre otros motivos, con las condiciones socioeconómicas de las familias, las cuales fueron calificadas por el 94% de los participantes como precarias, deficientes o insuficientes”, dijo.
A los entrevistados que dijeron tener hijos, se les preguntó, además, por su percepción sobre la autoridad que ejercen sobre los niños y por el respeto que éstos perciben de esa autoridad. Al respecto, el 64% la calificaron como buena y el 57% reconoció que ésta es bien percibida por los menores.
Con relación al reconocimiento jurídico y la protección de la familia, el 91% de los encuestados consideró que es insuficiente, que está desprotegida y que no cuenta con las garantías suficientes para exigir el cumplimiento de sus derechos.
En cuanto al reconocimiento y protección de la maternidad en Colombia, el 84% de los consultados dijo que es deficiente y respecto a esta misma pregunta, pero relacionada con la paternidad, el 92% reconoció que es insuficiente.
Por condiciones laborales, el 44% de los encuestados calificó como bueno el acceso al trabajo formal que tienen los miembros de la familia; el 71% evaluó como aceptable la posibilidad que tienen de armonizar los tiempos de su trabajo con los tiempos de familia; pero el 82% rajó a las organizaciones y empleadores a quienes señaló como empresas que no son familiarmente responsables.
Al preguntar las percepciones por el acceso a servicios públicos, el 72% de los entrevistados reconoció que cuenta con un buen servicio de educación, el 57% consideró que tiene un aceptable servicio de salud; respecto a seguridad ciudadana, el 74% dijo sentirse aún inseguro, aunque valora los esfuerzos de las autoridades; y un 60% señaló que los medios de transporte son ineficientes e insuficientes para la cantidad de gente que los utiliza.
En relación al acceso a las nuevas tecnologías y cómo éstas están afectando a la familia, las percepciones de los participantes sobre el aporte de los dispositivos móviles con acceso a Internet a la comunicación familiar, el 39% lo calificó como aceptable y el 29% como bueno.
Al preguntarles por la protección de la intimidad familiar en el uso que hace con los dispositivos móviles, el 38% lo evaluó como bueno y el 32% como aceptable.
Finalmente, se les indagó sobre el manejo y resolución de conflictos familiares, y el 54% lo calificaron como bueno./EL NUEVO SIGLO con informe U. de la Sabana