La Personería de Bogotá, tras seguimiento efectuado recientemente determinó que las Unidades de Reacción Inmediata (URI) presentan un sobrecupo del 222 por ciento, que ha hecho disparar las alarmas para demandar de las autoridades competentes acciones inmediatas.
Las preocupantes cifras indican que en las cinco URI que existen en el Distrito, más las celdas del CTI, se tiene capacidad para mantener máximo a 140 detenidos y, sin embargo, existen 312, de los cuales 230 se encuentran con medida de aseguramiento y 82 para judicializar. Así lo evidenció el organismo de control en las URI de Paloquemao, Usaquén, La Granja, Kennedy, Ciudad Bolívar y, adicionalmente, el CTI, en cuyas celdas una persona no puede permanecer durante más de 36 horas.
Esos lugares no cuentan con camas, alimentación, baños ni mínimas condiciones de permanencia digna; hay ciudadanos recluidos desde hace más de quince días que duermen en los pisos, lo cual ha generado grave riesgo por insalubridad e inseguridad.
Pese a la reunión que se realizó entre el Ministerio Público y las autoridades responsables antes de la Semana Santa, nuevamente se ha detectado un sobrecupo que ha incidido en la aparición de enfermedades y proliferación de virus, lo cual ha precipitado la expedición de incapacidades a los distintos funcionarios de las entidades que cumplen turnos y tienen que trabajar en ese ambiente.
La Personería encontró que, adicionalmente, se están generando condiciones de inseguridad para los funcionarios, pues su contacto es permanente con retenidos que permanecen esposados en pasillos y las escaleras por donde deben desplazarse, con el riesgo de ser víctimas de eventuales agresiones.
En algunas URI los internos han intentado amotinarse, debido, además de la inseguridad, al desespero a que han llegado por permanecer durante largas jornadas en malas condiciones y por no haber solución de traslado de las personas que llevan mayor tiempo retenidas como ocurrió en la URI de Usaquén el pasado 9 de abril. También fue detectado un intento de fuga en la URI de Ciudad Bolívar y varias fugas en Kennedy.