Senadores del Partido Demócrata bloquearon en esa cámara del Congreso estadounidense la votación de un polémico proyecto de ley que define el presupuesto para el Departamento de Seguridad Interna (DHS) pero vacía de recursos las medidas de alivio migratorio.
En diciembre pasado, los legisladores habían aprobado un presupuesto federal para todo el año fiscal 2015 pero excluyeron del paquete al DHS, que tiene recursos aprobados apenas hasta el 27 de febrero.
Ya en enero, la Cámara de Representantes (diputados) aprobó un nuevo presupuesto para ese departamento, pero con cinco condicionantes que eliminan recursos para aplicar las medidas ejecutivas anunciadas por el presidente Barack Obama y que se proponen sacar de la ilegalidad y del camino a la deportación a varios millones de inmigrantes.
Este martes, sin embargo, los senadores demócratas bloquearon la discusión de esa ley, alegando que no aceptarán que los 40.000 millones de dólares considerados críticos para adoptar las medidas de alivio migratorio se transformen en rehenes de una disputa política.
"Estaremos felices de discutir la seguridad interna, pero no con un arma apuntada en nuestra cabeza o en la cabeza del presidente", dijo el senador demócrata Chuck Schumer.
El líder de los demócratas en el Senado, Harry Reid, dijo que si los legisladores del opositor Partido Republicano "quieren arreglar nuestro desastroso sistema migratorio, estoy dispuesto a un debate. Pero no se puede poner en riesgo la seguridad del país".
Los republicanos consideraron que el presidente se sobrepasó en sus atribuciones al determinar medidas ejecutivas sobre migración.
El bloqueo adoptado este martes fuerza a los legisladores a construir un acuerdo en apenas tres semanas y aprobar una nueva ley sobre el presupuesto del DHS.
En caso de no ser posible llegar a un acuerdo, partes esenciales del DHS -como las que cuidan de la seguridad fronteriza, las amenazas cibernéticas o hasta el Servicio Secreto- se verán ante la necesidad de cerrar temporalmente sus puertas por falta de presupuesto legal para funcionar.
El líder de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell, admitió este martes que el voto se proponía fundamentalmente sancionar al partido Demócrata por apoyar a Obama, quien, afirmó, "repetidamente se sobrepasa en su autoridad".
Sin embargo, otro importante senador Republicano, el exaspirante presidencial John McCain, sugirió que era necesario tener alternativas a mano: "yo no apoyo la idea de cerrar el Departamento de Seguridad Interna", dijo.
El lunes, Obama adelantó que un fracaso en las negociaciones para aprobar un presupuesto al DHS suspendería, a partir de 27 de febrero, el pago de los salarios a unos 40.000 agentes fronterizos, 50.000 funcionarios de seguridad aeroportuaria y unos 13.000 oficiales de inmigración/AFP.