Mucho antes de que fuera el autor detrás de varias de las más espectaculares y extravagantes películas de acción de todos los tiempos, Luc Besson era un niño enamorado de un personaje de historietas.

Su primer encuentro con Laureline, la heroína interpretada por Cara Delevingne en su reciente producción (estrenada l viernes en EU y en un mes en América Latina) "Valerian y la ciudad de los mil planetas", ocurrió cuando tenía 10 años y vivía a unos 40 km de París.

Era 1969 y aburrido en el tedio de una vida bucólica, se topó con la revista "Pilote" donde estaba publicada el cómic "Valérian y Laureline".

"Fue un tiempo en que no había internet, sino un canal de televisión en blanco y negro y mi padrastro no tenía música en casa. Así que la vida era bastante fría", dijo el cineasta francés de 58 años en una entrevista reciente en Beverly Hills.

"No estaba pasando mucha cosa, no había chances de escapar y de repente, recuerdo esas primeras páginas de 'Pilote'. Era un libro de historietas y ahí estaba una pareja viajando en espacio y tiempo, combatiendo alienígenas", siguió.

Una de las primeras cosas que observó fue ese espíritu independiente de Laureline que nunca antes había visto. "Era libre, era una dura, matando extraterrestres. La primera imagen de esta mujer era muy fuerte y me enamoré de inmediato, era muy sexy", rememoró.

Alto octanaje

Besson asumió esta imagen de feminidad y la plasmó en sus películas, con personajes sobre mujeres letales que para nada necesitaban a un hombre para sostener una pistola.

Besson arrancó en la década de los 1980 con cintas de acción francesas influenciadas por Hollywood para luego dar paso al éxito internacional con "Azul profundo" (1988), "Nikita" (1990) sobre una mujer asesina y "El perfecto asesino" (1994) sobre una joven que se convierte en protegida de un asesino a sueldo.

Desde aquellos días, dirigió otras cintas que recibieron críticas encontradas pero que fueron éxitos de taquilla como las series de alto octanaje "El transportador" y "Taken".

Valerian fue su primer amor, pero no el único: el director se casó cuatro veces, incluyendo una breve unión con Milla Jovovich, su estrella en "El quinto elemento" (1997), y tiene cinco hijos.

Besson desarrolló un talento para descubrir el talento femenino, ya sea introduciendo a Jovovich o consiguiendo dejar a todos boquiabiertos con el debut de Natalie Portman en "El perfecto asesino" cuando tenía 13 años.

"En los 70 y 80 las películas eran todas vistas desde el lado de los hombres y eso no es justo, con la mujer llorando atrás [preguntando] '¿cuándo vuelves?'", dijo Besson durante la presentación de la película.

Villanos corporativos

Si bien es una película de acción espacial con infinidad de efectos especiales, "Valerian" también aborda temas actuales como el cambio climático, la diversidad y las dificultades que pasa un inmigrante.

Fue filmada en París el año pasado en medio de grandes cambios políticos en Europa y Estados Unidos, con populistas buscando ganar terreno.

Besson se resiste a hablar de política, pero consideró que su película es una alegoría al altivo poder de las grandes corporaciones.

Comparó por ejemplo a los villanos con los ejecutivos involucrados en el escándalo de Volkswagen, que admitieron que 11 millones de sus carros de diésel tenían un software que falsificaba los resultados de las pruebas sobre contaminación.

"Engañan, se salen con la suya y no quieren pagar", criticó.

Y aunque Besson quiere que sus películas sean serias - para evitar simplemente ser una "hamburguesa con queso" - se mostró contra los cineastas que son demasiado severos sobre su arte.

"Me encanta hablar sobre todas estas cosas, ecología, inmigración, con una pequeña sonrisa y divirtiéndome al mismo tiempo, porque creo que al final del día la gente quiere ver una película y decir 'me divertí, fue increíble' y queda algo".

Delevingne: Soy una romántica incurable

Por su parte, la protagonista de la cinta, Cara Delevingne es una de las modelos más demandadas del mundo, pero su primer y verdadero amor fue siempre la actuación. Solo que la transición no fue nada sencilla y le demandó trabajar el doble.

De 24 años, ha ganado millones de dólares modelando en pasarelas de Londres, París y Milán para marcas como Burberry y Chanel, y tiene incontables portadas de Vogue y Grazia.

Su ascenso en el cine arrancó con "Anna Karenina" (2012) junto a Keira Knightley, para tomar un giro hacia el drama adolescente "Ciudades de papel" y luego a la taquillera cinta de villanos "Escuadrón suicida". La más reciente es ésta con Besson.

Delevingne contó en una entrevista con la AFP cómo la transición de la pasarela a la gran pantalla no fue tan fácil como parece.

Hace dos años, en un programa matutino en Estados Unidos al que fue invitada para promover "Ciudades de papel", le hicieron preguntas taimadas, como si había leído la novela de John Green que inspiró la cinta. No solo había hecho su tarea entonces, sino que escribió su propio romance y debe ser publicado próximamente.

"Siempre habrá gente así", dijo. "Creo que es solo otra oportunidad para mantenerme firme y mostrar que me esfuerzo en mi trabajo, que trabajo muy duro y estoy dispuesta a mostrar que esa gente [que la subestima] está equivocada", indicó.

Voz de mucha fuerza en redes sociales con 40 millones de seguidores en Instagram, Delevingne ha sido elogiada por servir de apoyo a muchos adolescentes que luchan con sus emociones, hablando abiertamente de su bisexualidad y sus batallas contra la depresión cuando tenía 15 años.

"Me siento bendecida de ser una influencia fuerte en niñas y adolescentes", dijo. "Esa ha sido una meta desde que era más joven, servir de figura modelo, que puedan ver cómo he seguido cada uno de mis sueños con trabajo duro y determinación".

 Talento natural

Cuando hizo el casting para Laureline, Besson pensó inmediatamente en Delevingne como la actriz que podía mantener el espíritu de empoderamiento, del personaje valiente que combate el crimen junto a Valerian.

"Ella se convirtió en modelo por accidente porque un agente la vio y le dijo 'puedes hacer buenas fotos'. Pero ella no estaba hecha para eso. Ella tuvo éxito porque es simpática, pero es una actriz natural, me sorprendió su capacidad y creo que está al comienzo de una larga, larga carrera", dijo Besson-

La crítica define el personaje de Laureline como una paradoja: una mujer intrépida, independiente, que no obstante define su felicidad a través de su éxito buscando el amor.

"Eso es lo amo sobre la vida en general, las dicotomías de todo", indicó Delevingne.

"Claro que entiendo lo de querer ser una mujer que puede cuidarse a sí misma y ser completamente independiente, pero también, que al final del día, todo lo que quieres es ir a casa y tener a alguien que te ame y se preocupe por ti  y viceversa, y llegar algún día a tener una familia", indicó