SEGURO de que, una vez más, demostrará que cuenta con la mayoría para seguir gobernando y haciendo oídos sordos a los escándalos que se tejen a su alrededor, el jefe de gobierno italiano, Silvio Berlusconi, defenderá hoy su Ejecutivo, horas antes de que en el Parlamento se someta a votación una nueva moción de confianza.
Berlusconi, que comparecerá hoy ante el Parlamento se someterá a la mencionada moción mañana, después de que la Cámara de Diputados rechazara el martes mediante votación el artículo 1 del balance económico del Estado, lo que implica la anulación de todo el documento.
La votación se cerró con 290 votos a favor y 290 votos en contra, y no logró la mayoría de 291, por lo que se multiplicaron las dudas sobre una crisis en el gobierno que preside el multimillonario político, cuya mayoría atraviesa dificultades internas.
"La oposición se equivoca, el gobierno no ha perdido la mayoría del Parlamento", aseguró Fabrizio Cicchitto, portavoz del partido de Berlusconi, Pueblo de las Libertades.
Pero más que la moción de censura, de las que Berlusconi se ha salvado 51 veces desde que regresó al poder en el 2008, lo que pesa políticamente, según varios editorialistas, es el malestar que reina dentro de algunos sectores de la mayoría gubernamental, profundamente dividida.
La ausencia durante la votación en la Cámara de Diputados del ministro de Economía, Giulio Tremonti y del líder populista de la Liga Norte, Umberto Bosse, principal aliado de Berlusconi, oficialmente porque estaban ocupados, así como de 20 diputados de la mayoría, provocó ríos de reacciones.
"La no aprobación del artículo 1 de las cuentas generales del Estado y las innegables manifestaciones de tensión en el seno del gobierno, con la consiguiente incertidumbres para la adopción de las medidas prometidas o anunciadas, suscitan dudas y preocupaciones que no pueden evitar una reflexión institucional", escribió el Presidente de la República, Giorgio Napolitano.
El presidente Napolitano, única personalidad que puede disolver el Parlamento y convocar elecciones anticipadas, invitó a Berlusconi a someterse a la moción de confianza.
A las tensiones en los últimos meses entre el ministro Tremonti y Berlusconi por la grave crisis económica y financiera hay que sumar la irritación de varios ex democratacristianos, como los ex ministros Claudio Scajola y Beppe Pisanu.
Según la prensa, se trata de un grupo de rebeldes favorables a que Berlusconi sea remplazado por una personalidad técnica hasta el final de la legislatura en el 2013.
Sin embargo, Scajola garantizó a Berlusconi que los treinta diputados de su corriente votarán a favor del gobierno./EL NUEVO SIGLO - AFP