Uno de los objetivos del Gobierno de dejar despejado el panorama del régimen contributivo de la salud, ha venido avanzando en los últimos meses en beneficio de los usuarios y para abrir camino a una solución financiera del sector.

Entre las medidas establecidas por el Ministerio de Salud y Protección Social en este sentido, está la de clarificar las reglas de juego del Régimen Contributivo.

De acuerdo a esta cartera, se avanzó en la resolución de los recobros glosados y presentados nuevamente para revisión (la idea es pagar lo que debe pagarse de una vez por todas), en la definición de las condiciones de habilitación financiera (existe un decreto para comentarios que será expedido en los primeros meses de 2012) y en el diseño de un nuevo sistema de recobros que, entre otros cosas, permita el pago directo de los medicamentos y servicios no Pos.

Esto deberá facilitar la posibilidad de copagos dependiendo de los Ingresos Base de Cotización de los afiliados (el nuevo sistema estaría listo en abril en cumplimiento de los plazos estipulados por la Corte Constitucional). 

En cuanto al Régimen Subsidiado –según el Gobierno- también están en marcha varios procesos de ajuste institucional. Ya fue publicado (para comentarios)  un decreto que propone un nuevo modelo de aseguramiento para zonas dispersas, basado en un único asegurador y un operador independiente de la red de prestación.

El nuevo modelo reconoce la ineficacia de la libre competencia en las zonas dispersas. Paralelamente, se ha avanzado en un proyecto de decreto que le permitiría al distrito de Bogotá encargarse, de manera transitoria, de la administración y operación del régimen subsidiado. El decreto reconoce no sólo las dificultades coyunturales, sino también la conveniencia de que las secretarias de salud puedan jugar un papel protagónico en la administración.

Mientras tanto la Superintendencia de Salud, de manera coordinada con el Ministerio, ha comenzado un proceso de ajuste institucional con el fin de fortalecer sus capacidades de vigilancia y control. El primer paso consiste en un rediseño  del régimen de intervención.

Con más de 50 entidades intervenidas, entre EPS, hospitales y demás, las funciones de vigilancia y control de la Superintendencia han sido desplazados por las labores administrativas.

De otro lado, la llamada “Ley de Cuentas Maestras” liberó recursos acumulados en las cuentas maestras del Régimen Subsidiado por más de 1,7 billones de pesos. Los recursos podrán invertirse ahora en el pago de deudas, el saneamiento fiscal, la dotación e infraestructura hospitalaria.