La víspera de que se cumpliera un año de la salida de los soldados estadounidenses de Irak, una ola de atentados en ese país dejó ayer 48 muertos y más de un centenar de heridos
Un atentado con coche bomba en la parte norte de Bagdad dejó por lo menos 11 muertos e hirió a 40 más.
En una autopista en el oeste de Tikrit, tres hombres armados dispararon contra un puesto de control. Luego salieron del coche en el que iban y éste estalló. Un total de cinco policías murieron y cinco más resultaron heridos.
En el pueblo de Al Buslaibi, en el norte de Bagdad, una bomba explotó en la carretera cuando pasaba una patrulla militar y dejó tres muertos. Un ataque llevado a cabo por hombres armados en ese mismo lugar causó la muerte de tres soldados más.
En Tuz Jurmatu (norte), dos atentados con coche bomba contra una mezquita chiita dejaron cinco muertos y 26 heridos. La comunidad chiita, mayoritaria en Irak, es con frecuencia blanco de estos ataques llevados a cabo por insurgentes sunitas.
Cerca de Mosul (norte) otro atentado con coche bomba dejó siete muertos y 12 heridos en el pueblo shabak de Jaznah. La comunidad shabak, una secta esotérica que forma parte del chiismo y tiene cerca de 30.000 miembros, fue perseguida bajo el régimen de Sadam Husein y luego ha sido blanco de los ataques de Al Qaida.
El domingo, había otra ola de atentados en el país, que dejó 19 muertos y decenas de heridos, principalmente en dos mezquitas chiitas y en la sede de un partido político kurdo en el norte del país.
La violencia en Irak ha disminuido considerablemente con respecto a los años 2006 y 2007, pero sigue siendo habitual, nueve años después de la invasión del país llevada a cabo por fuerzas internacionales lideradas por Estados Unidos, las cuales derrocaron a Sadam Husein./AFP