El 27 de marzo la vida de Natalia Ponce de León dio un giro de 180 grados, luego de que Jonathan Vega Chávez de 32 año, le lanzara ácido que quemó varias partes de su cuerpo.
La mujer manifestó que hasta ahora empezó a salir y que es un hecho muy doloroso, pero se mostró muy positiva, narró que “las cicatrices aún se demoran entre nueve meses y un año en sanar. Anteriormente, me reconstruyeron las tres capas de piel, porque se fueron totalmente ya que sufrí lesiones en mis piernas, en mi abdomen y en mi cara”.
De igual manera, Ponce dijo que se siente muy indignada por lo “que pasó con la pareja ayer en Soacha ¿por qué por mí ofrecieron una recompensa de $75 millones y a ellos una de $10 millones? ¿Qué hace la diferencia? El dolor es igual. El dolor no tiene precio ni elitismo (…) tienen que haber castigos y penas mucho más fuertes para alguien que lo mata a uno en vida, ya que es una destrucción física y espiritual”.
Finalmente argumentó que gracias a su familia y a su “madre que es una persona muy fuerte”, ha podido salir adelante y no caer en la depresión ya que “la parte anímica contribuye con el 50% de la recuperación".