Argentina, líder de la eliminatoria sudamericana al Mundial de Brasil-2014, ensayó un esquema defensivo y contragolpeador para afrontar el desafío de la altura de La Paz, donde se medirá mañana con Bolivia por la duodécima fecha.
El técnico Alejandro Sabella paró en la última práctica un equipo con un diseño táctico de 5-4-1, en el que sólo figuró como solitario delantero Rodrigo Palacio, pero nada se sabe aún oficialmente sobre la formación albiceleste.
El artillero Lionel Messi se incorporó ayer a los entrenamientos, tras un viaje a Rosario para visitar familiares y Sabella podría probar un esquema 5-3-2 que incluya a La Pulga junto con Palacio en la ofensiva.
Otra variante es que incluya en la función de ataque a Ángel Di María, quien ya cumplió una suspensión.
En la mente de los argentinos está fresca la catastrófica goleada por 6-1 que le propinó Bolivia en la eliminatoria para el Mundial Sudáfrica-2010, cuando bajo la dirección técnica de Diego Maradona se minimizaron e ignoraron los efectos de la altura.
Messi declaró que “todos sabemos lo que pasó la última vez, fue un golpe muy duro para todos los que estuvimos, y por eso queremos cambiar la imagen que dejamos”.
El estadio Hernando Siles será escenario del choque entre el puntero y uno de los últimos de la tabla, pero lo concreto es que Argentina no se confía ni mucho menos ante la presunta debilidad de su rival.
Ni siquiera se toma en cuenta en el campamento argentino que los del Altiplano vienen de ser vapuleados por Colombia (5-0), y los albicelestes se lucieron al golear 3-0 a Venezuela.
Además, el historial entre ambos marca una amplia diferencia para Argentina, que ganó 22 de los 32 partidos oficiales entre ambas selecciones, con apenas 6 éxitos de Bolivia, pero en los últimos tres encuentros los albicelestes no pudieron festejar.
El último éxito argentino fue en noviembre de 2007, camino al Mundial de Sudáfrica, con un 3-0 en Buenos Aires, pero en abril de 2009, Bolivia celebró uno de los mayores triunfos de su historia con aquel lapidario 6-1.
Después, los bolivianos consiguieron rescatar sendos empates 1-1, el primero de ellos por la Copa América-2011 que organizaba Argentina, y en noviembre del mismo año, en el estadio Monumental de Buenos Aires, por la tercera fecha de la clasificación a Brasil.
Por eliminatorias mundialistas, la estadística también favorece a los argentinos, pues de 16 partidos oficiales ganaron 11, con un empate y 4 victorias para Bolivia, todas logradas como local, mientras que el último triunfo gaucho en La Paz fue en 2005, por 2-1, con tantos de Luciano Figueroa y Luciano Galletti.
Sabella parece dispuesto a no repetir el error cometido por Maradona, que acudió a La Paz con la misma formación que había goleado días antes a Venezuela, y pronto los jugadores se mostraron agotados y faltos de reacción.
Argentina viajará a La Paz cerca del medio día, para tratar de llegar con el menor tiempo posible antes del partido y así reducir los efectos de la altura.