Unos 450.000 usuarios de electricidad de la ciudad de Buenos Aires y su periferia sufrieron la noche del miércoles un apagón por la caída de dos líneas de alta tensión, informaron las empresas de energía en comunicados de prensa.
"Unos 450 mil clientes quedaron sin energía en barrios de la capital y el conurbano (cordón)", dijo la firma Edesur, al cabo de una jornada agobiante de calor, con temperaturas de 36 grados centígrados que multiplicaron el consumo energético.
Los semáforos dejaron de funcionar y las líneas de telefónos móviles se saturaron de modo que la población pasó momentos de zozobra o al menos de incomodidad, incluso al paralizarse las líneas de Subterráneos (metro).
Unas 14 millones de personas viven en el conglomerado urbano de la capital y su periferia.
El deperfecto se originó "en dos líneas de alta tension", dijo la firma Edenor, pero las empresas no pudieron aún precisar la razón de la falla en los sistemas.
El contraste que ofrecía la noche de Buenos Aires el miércoles era de barrios con luces a pleno con otros a oscuras, según constató la AFP.
El inconveniente eléctrico afectó también a edificios públicos, entre ellos la Casa Rosada (gobierno) y el Congreso, ubicados en el área del microcentro de la capital.
La situación tendía a normalizarse lentamente en algunos barrios, según comprobó la AFP en una recorrida.