Por la no asistencia de la procesada argumentando que tenía una cita médica se aplazó la audiencia de Marilú Méndez dentro del escándalo de Fondelibertad.

La ex directora CTI quien tiene medida de aseguramiento domiciliaria, iba a ser acusada por los delitos de tráfico de influencias, peculado por apropiación y falsedad en documento público, dentro de las investigaciones que se adelantan por la contratación en Fondelibertad.
Méndez presuntamente habría movió sus influencias, a través de Harlan Henao, ex director de Fondelibertad, para favorecer a la sociedad FAES S.A.S. por medio de una capacitación que tuvo  un valor cercano a los $51 millones.

Además de haber traslado a un personal de la Fiscalía General de Cali a Bogotá con el fin de dictar la capacitación adjudicada a una de las firmas en la que intervino. El peculado habría sido por un valor de $2.800 millones, lo cual es un detrimento para la entidad que corrió con los gastos de traslado.