La restauración de la tierra tiene un enorme potencial para ayudar al mundo a limitar el cambio climático y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, según un nuevo estudio del Panel Internacional de Recursos (IRP).
La crisis de nuestro clima está reduciendo la capacidad de la tierra para mantener a la humanidad, reveló el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) en un reciente informe. En su nuevo estudio, el IRP va más allá y examina los resultados probables de rehabilitar la tierra. Al hacerlo, encontró resultados positivos que apoyarían el cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible acordados por las naciones del mundo como parte de la Agenda 2030.
Restaurar la Tierra para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible se lanzó en el marco de la 14º Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación, en Nueva Delhi, India.
El estudio aporta nuevos hallazgos a una reciente investigación del IRP, Perspectiva de los Recursos Mundiales 2019, la cual mostró que hasta 90% de la pérdida de biodiversidad y el estrés hídrico, y hasta la mitad de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, pueden atribuirse a la forma en que extraemos y utilizamos los recursos naturales.
“Está claro que se requiere un gran avance en todos los frentes para que el mundo logre el desarrollo sostenible y revierta las crisis del clima y la naturaleza”, dijo Inger Andersen, directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
“La restauración de paisajes traerá beneficios obvios para el clima, la biodiversidad y los medios de vida. Invertir en la infraestructura natural proporcionará un ingrediente clave a la seguridad planetaria”, agregó. “El trabajo del Panel muestra cómo la restauración bien planificada a escala de paisaje no solo detiene la degradación, sino que también genera resultados positivos. Es hora de que la innovación, el pensamiento sistémico y la acción ambiciosa nos pongan en camino hacia la sostenibilidad”.
La Década de las Naciones Unidas para la Restauración de los Ecosistemas 2021-2030 es un llamado a la acción mundial para alcanzar el objetivo de restaurar 350 millones de hectáreas de paisajes degradados en 2030. Devolver la vida a estas tierras en la próxima década podría generar servicios ecosistémicos valorados en US$ 9 billones y secuestrar de la atmósfera entre 13 y 26 gigatoneladas adicionales de gases de efecto invernadero.
El IRP utiliza una serie de ejemplos para ilustrar los beneficios colaterales y las compensaciones entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible durante el proceso de restauración de tierras. El panel recomienda un análisis sistémico antes de realizar inversiones para evitar consecuencias no deseadas.
Por ejemplo, la siembra en monocultivo podría contribuir al cumplimiento de la meta de restauración de suelos descrito en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 15 (Vida en la Tierra) y proporcionar algunos beneficios para el clima (Objetivo 13) a través del secuestro de carbono. Sin embargo, al mismo tiempo podría ser un obstáculo para las metas de conservación de biodiversidad (Objetivo 15).
Aproximadamente una cuarta parte de la tierra del mundo está degradada hoy día. La restauración y rehabilitación representan una de las tres estrategias principales para lograr el Objetivo 15, particularmente para cumplir con la meta de neutralidad de la degradación de la tierra.
Los hallazgos clave del nuevo estudio incluyen:
La restauración y rehabilitación de tierras pueden tener importantes beneficios colaterales para todos los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
El alcance de los beneficios colaterales de la restauración, y los posibles riesgos y compensaciones, varían ampliamente entre los Objetivos y sus respectivas metas.
Los beneficios colaterales del proceso de restauración a menudo son muy diferentes a los de la tierra restaurada y funcionan a diferentes escalas temporales.
Las proyecciones cuantitativas y cualitativas en escalas locales a globales, incluyendo el desarrollo de escenarios, pueden ayudar a guiar futuras inversiones y coordinar proyectos.
Un enfoque de paisaje integrado, con inversiones focalizadas, es clave para aumentar el rendimiento total de la restauración./ONU Medio Ambiente