Científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) rechazaron la edición genética en humanos y aseguraron que es inaceptable.
La postura de los expertos de esta prestigiosa institución mexicana se da a propósito del escándalo ocurrido la semana pasada, cuando el genetista chino He Jiankui comunicó a través de la plataforma YouTube que había modificado genéticamente embriones humanos.
El experimento de Jiankui, quien fue expulsado de la Universidad de Hong Kong, se concretó con el nacimiento de dos niñas gemelas cuyos genes fueron alterados para evitar que replicaran el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) que padece su padre.
Según Félix Recillas Targa, director del Instituto de Fisiología Celular (IFC) de esta universidad, lo que hizo el genetista chino “es inadmisible porque los embriones estaban sanos y fueron modificados genéticamente con el sistema CRISPR/Cas 9, causando una mutación en el gen CCR5” para que las pequeñas fueran resistentes a una infección por VIH, detalla la UNAM en un comunicado.
La nota asegura que un aspecto que molestó a la comunidad científica internacional “es que los resultados no fueron publicados en una revista especializada, así que no fueron revisados por sus pares ni están a disposición de los investigadores”.
“No sabemos exactamente cómo se hizo el proceso”, dijo Recillas, al aclarar que aunque la situación preocupa a la comunidad científica, no quisieran que se satanizara al sistema CRISPR/Cas9, que ha proporcionado información inédita y valiosa para el desarrollo de la investigación científica “cuando se aplica en otros modelos animales permitidos”.
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El sistema CRISPR/Cas9 (del inglés Clustered regularly interspaced short palindromic repeats, o Repeticiones palindrómicas cortas y regularmente interespaciadas) es una herramienta utilizada para editar el genoma de cualquier célula.
La segunda parte de su nombre se refiere a una serie de proteínas (llamadas Cas), principalmente nucleasas asociadas. Surgió como una investigación en bacterias que hacen corte y confección de genes de manera natural para defenderse de ataques de virus. “Ellas tienen una serie de proteínas que les ayudan a incorporar genes de los virus que infectan su genoma”, explicó la UNAM en la nota.
Rosa Navarro, investigadora del IFC, explicó que esta técnica fue adaptada “para utilizarse en otros organismos y ha revolucionado la forma en la que hacemos modificación genética”, pero advirtió que en muchas ocasiones dicho procedimiento termina mutando o cambiando un gen.
Por último, Ricardo Tapia Ibargüengoytia, investigador emérito del IFC y miembro del Colegio de Bioética, manifestó que esta nueva técnica ha facilitado la edición de genes en varios modelos animales, “pero no se había hecho en humanos”.
“El problema es que He Jiankui lo hizo no en un enfermo para poderlo curar, sino en embriones humanos sanos”, concluyó.