Alud de críticas al banrepública | El Nuevo Siglo
Martes, 31 de Enero de 2012

El incremento en las tasas de interés autorizado por la Junta del Banco de la República generó diversas opiniones entre los agentes del mercado e inclusive entre los representantes del Gobierno que consideran que el Emisor se equivocó.

El ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan Camilo Restrepo Salazar calificó de muy lamentable la medida que llevó las tasas al cinco por ciento al considerar que este será un factor adicional para atraer capitales extranjeros, asunto que conlleva a la llegada de más dólares y por consiguiente a la apreciación de la moneda colombiana.
“El paganini y quien seguirá llevando del bulto será el sector agropecuario que verá menos ingreso, pérdida en el valor de sus exportaciones y si por el contrario mayores costos en la producción agrícola. Hay sectores ya de por sí golpeados como el de banano, flores, carne y café, entre otros”, afirmó Restrepo Salazar.
El jefe de la cartera agropecuaria consideró que el Banco de la República tiene un amplio margen para intervenir el mercado de divisas y aumentar por esa vía las reservas internacionales.
“Yo lamento mucho esa decisión porque habrá mayor revaluación y por consiguiente una pérdida preocupante para los empresarios del campo”, concluyó.
Por su parte el ex ministro de Hacienda, Rudolf Hommes Rodríguez aseveró en EL NUEVO SIGLO que la medida no deja de ser preocupante y aclaró que dicha determinación obedeció más a frenar la inflación que a ponerle coto al lío de la revaluación.
Expresó que el alza en la tasa de interés tendrá un impacto sobre el tipo de cambio, asunto que no es afortunado en estos tiempos en que la inversión extranjera mira a América Latina y puntualmente a Colombia.
“Aquí hay que darle al Banco el beneficio de la duda y de momento es mejor creer que se actuó con responsabilidad”, declaró.
Sobre la recomendación del ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverri a los hogares colombianos y el necesario ajuste en el gasto, Hommes dijo que ello no es más que el temor explícito que hay por el recalentamiento de la economía.