Aunque se da por sentado que hoy, antes de las doce de la noche, será aprobado el proyecto de presupuesto, están en el filo del abismo los proyectos de acuerdo sobre reforma tributaria y cupo de endeudamiento por 4,3 billones de pesos, porque, como lo dijo EL NUEVO SIGLO en la segunda semana de noviembre, el tiempo no le alcanza a la administración de Gustavo Petro.

Y puede ser una caída libre porque para lograr aprobar estos dos proyectos, fundamentales para cumplir el plan de Desarrollo “Bogotá Humana”, la administración debe tener como mínimo veintitrés concejales que apoyen, pero tan solo tienen fijos los 8 Progresistas y los 4 del Polo Democrático.

No hubo humo blanco en la reunión que se hizo en la noche del lunes en el Palacio Liévano entre el mandatario capitalino y algunos concejales de la Comisión de Hacienda, en la que no estuvieron Miguel Uribe y María Victoria Vargas, del Partido Liberal, Juan Carlos Flórez, de la ASI, William Moreno, de Progresistas, y Orlando Parada, de La U.

La presidenta de la Comisión de Hacienda, Clara Lucia Sandoval, de La U, cuando se le preguntó si el Alcalde los había convencido, de inmediato y con sonrisa dijo “no creo”, agregando que “le indique que hay unos tiempos en el Concejo y un reglamento que o se pueden pasar por encima”.

Sin embargo, en la administración se cree con optimismo que pasan los dos proyectos fundamentales para la movilidad de la ciudad y puede ser que tengan el aval en primer debate pero en la plenaria se caerían porque no tienen los veintitrés votos.

Ayer, durante más de doce horas los diferentes concejales expusieron sus puntos de vista sobre el proyecto de presupuesto por13,6 billones de pesos pero existió durante todo el día la versión en torno a que debían votar la iniciativa por al día siguiente habían programado comisiones por la mañana y por la tarde.

En la noche de ayer se determinó correr la sesión de gobierno para dar paso al estudio del presupuesto pero como existía muchas dudas se creó una comisión accidental para el estudio del articulado conformada por la concejal Vargas y sus colegas es Javier Palacio (La U), Roberto Sáenz (Progresistas), José Arthur Bernal (Cambio Radical) y Edward Aníbal Arias (Partido Verde). A las 8 se reúnen en el Salón Presidentes.

El concejal Parada dijo que la corporación no debe premiar a una administración que improvisa con los dineros de los capitalinos. “La aprobación del presupuesto por el Concejo de la ciudad es un voto de confianza de la corporación con el Alcalde de turno, es un gesto de apoyo al manejo mismo de la ciudad”, pero para Parada “Petro le ha fallado a la ciudadanía, así lo demuestran los últimos sondeos, que ubican al alcalde de Bogotá en el penúltimo lugar de calificación de gestión entre los alcaldes de las ciudades capitales”.

Según Parada, la administración en su desespero por figurar mediáticamente ha optado por el camino de la confrontación y la batalla indiscriminada y antidemocrática. “Desde las discusiones del Plan de Desarrollo, incluso antes, no hemos compartido la visión maniquea del alcalde, donde los medianos logros o avances de la ciudad son atribuidos tramposamente a la administración, mientras los yerros permanentes son rápidamente atribuidos al accionar de mafias, paramilitares, conspiradores, etc. Así, la incapacidad de hacer se une con la incapacidad de identificarse como la causa de los problemas…La ciudad va por mal camino, y en un triste acto de reconocimiento, la mayoría de la población coincide en que Bogotá, al final de esta administración, no será un mejor lugar para vivir”, agregó.