Adopta presupuesto de austeridad Portugal | El Nuevo Siglo
Martes, 26 de Noviembre de 2013

Los diputados portugueses, abucheados por miles de manifestantes, adoptaron el martes un austero proyecto de presupuesto para 2014, que debe permitir al país, bajo rescate financiero, liberarse el próximo año de la tutela de sus acreedores.

 

Este presupuesto prevé duros recortes en el gasto público y alzas de impuestos por un valor total de 3.900 millones de euros, equivalentes al 2,3% del PIB.

La ley de Finanzas fue adoptada con los votos de los diputados de la coalición de gobierno de centroderecha, dirigida por el primer ministro Pedro Passos Coelho, que dispone de 132 de los 230 escaños del Parlamento. La oposición de izquierda, y en ella el Partido Socialista, votaron en contra.

 

El conjunto de la oposición anunció en las últimas semanas su intención de llevar varias medidas de la ley de Finanzas al Tribunal Constitucional, que ya obligó este año al gobierno a sustituir algunas de ellas, al considerarlas inconstitucionales.

"El presupuesto 2014 es un paso decisivo para permitir que Portugal recupere su autonomía financiera" y "concluya su programa de asistencia financiera", previsto en junio 2014, sostuvo la ministra de Finanzas Maria Luis Albuquerque.

Los funcionarios y los jubilados serán las categorías más afectadas por la dolorosa cura de austeridad que el gobierno administra al país.

Poco antes de la votación, al grito de "¡Gobierno dimisión!" miles de portugueses se manifestaron ante el parlamento, convocados por la CGTP, principal confederacón sindical, para protestar contra los recortes sociales.

 

Durante el discurso de la ministra de Finanzas, una quincena de manifestantes presentes en la galería del parlamento interrumpieron brevemente la intervención coreando "¡Dimisión, dimisión!", antes de ser desalojados por la policía.

Hundido por su deuda y con difícil acceso a los mercados financieros, Portugal obtuvo en mayo de 2011 una línea de crédito de 78.000 millones de euros, prometidos por el FMI y la Unión Europea a cambio de un drástico plan de recortes.

En el marco de ese plan de rescate, Portugal se comprometió ante sus acreedores a reducir su déficit público a 4% en 2014, contra 5,5% en 2013.

 

Para poner fin al rescate en junio próximo, Lisboa debe reconquistar la confianza de los mercados con el fin de financiar con un coste accesible su enorme deuda que alcanzaría este año, según la Comisión Europea, 123% del PIB.

Sin embargo Portugal ha confirmado su salida de recesión en el tercer trimestre de 2013, al registrar una tímida alza de su Producto Interior Bruto (PIB) de 0,2%. Pero la recuperación es frágil y la crisis está lejos de haber terminado, después de 30 meses de recesión.

 

Las previsiones para todo el año 2013 siguen siendo negativas, y el gobierno augura una caída del PIB del 1,8%, antes de una recuperación (+0,8%) en 2014.