El coronel ( r) del Ejército Nacional, Juan Carlos Castañeda Villamizar, y el ex alcalde de Recetor (Casanare), Flaminio Cocinero Costo. Fueron cobijados con resolución de acusación por una fiscal de Derechos Humanos y DIH que investiga las desapariciones y los homicidios de no menos de 30 habitantes de las veredas de ese municipio y de la población de Chámeza.
El proceso inicia con las denuncias elevadas por familiares de las víctimas, quienes indicaron a la Fiscalía que entre 2002 y 2003 integrantes de las Autodefensas Campesinas del Casanare citaban a los lugareños a reuniones, y posteriormente los desaparecían.
A lo largo de la instrucción los funcionarios judiciales establecieron que los campesinos citados por ese grupo ilegal eran torturados y posteriormente ultimados con arma blanca o un disparo de fusil.
Los convocados eran supuestos auxiliadores de la guerrilla y según testigos en la elaboración del listado de víctimas intervenía el entonces alcalde Cocinero Costo. También, según testimonios, Castañeda Villamizar, por entonces comandante del Batallón No.44, Ramón Pérez Nonato, se encargaba de no realizar operativos por la zona donde se moverían los integrantes de esas autodefensas.
Al calificar el proceso la fiscal a cargo acusó a Castañeda Villamizar y Cocinero Costo por su presunta responsabilidad en los delitos de desaparición forzada agravada, tortura agravada, homicidio en persona protegida, desplazamiento forzado y concierto para delinquir agravado.