El caos reinaba la noche del domingo en un barrio popular de Lagos, la capital económica de Nigeria, donde se estrelló un avión de línea con 153 personas a bordo, que impactó de pleno contra un edificio de viviendas de dos plantas y salió ardiendo.

Miles de curiosos bloquearon parcialmente los accesos al lugar del accidente, obstruyendo a los servicios de rescate. Los militares decidieron actuar enérgicamente, empleando sus porras de goma y sus puños e incluso lanzando una tabla de madera a la muchedumbre para abrir paso.

Las autoridades presumen que los 153 ocupantes del Boeing MD83 operado por la compañía Dana Air murieron. Además se cree que otras personas que se encontraban en el edificio habrían muerto también.

Los militares que intentaron contener a la muchedumbre recibieron pedradas. Sólo algunos vehículos de los servicios de socorro lograron alcanzar el lugar de la catástrofe tras abrirse paso.

Según testigos, inmediatamente después del accidente comenzaron los saqueos en el barrio de Iju, cerca del aeropuerto internacional de Lagos, una de las mayores aglomeraciones del continente africano con casi 15 millones de habitantes.

Tunji Malomo indicó a la AFP que cerró enseguida su bar cuando supo del accidente, y dio parte de saqueos.

"Es una zona muy poblada", declaró Martin Ajebayo, que también fue testigo del caos. "Hay gente que vive aquí", añadió señalando el edificio de viviendas golpeado por el avión.

Según varios habitantes interrogados por la AFP, el avión, que volaba a muy baja altura haciendo un fuerte ruido, impactó con un edificio de dos plantas.

El aparato "voló muy bajo durante cinco minutos con un ruido infernal, y se estrelló en una zona de viviendas (...) Luego se incendió", contó a la AFP un testigo.

Otro habitante de la zona, Tunji Dawodu, indicó que "acababa de salir de la iglesia hacia las 15H30 cuando escuché un ruido muy fuerte. Pensé que era una explosión". "Luego se vio una gran llamarada en el edificio contra el que chocó el avión", agregó.

Según los testimonios contradictorios de los habitantes, el avión cayó en picado.

Numerosos restos, entre los que se podía ver un ala desprendida de la carlinga, eran visibles en el lugar de la catástrofe.

La cola del avión, arrancada del resto de la carlinga, estaba en medio de los escombros incendiados, junto a un reactor metálico destrozado. En los alrededores había varios vehículos calcinados.

"Vi cómo el avión se acercaba cada vez más al suelo", apuntó Gift Onibo. "El avión no paraba de tambalearse", declaró por su lado Yusuf Babatunde, un joven testigo de la escena. "El piloto intentaba mantener el control del aparato, y luego se estrelló. Hubo un incendio enorme", añadió.

Las causas del accidente se desconocen por el momento. Tunji Oketunbi, portavoz de la oficina de investigación de accidentes, dijo que el balance definitivo de víctimas se dará sólo "cuando se completen la búsqueda y las tareas de rescate".

AFP