La policía indonesia mató a balazos a un presunto militante después de que este hubiera apuñalado a dos policías dentro de una mezquita cerca de la comisaría central de la policía nacional de Yakarta, menos de una semana después de un ataque islamista contra las fuerzas de seguridad.
El atacante acababa de orar con varios policías y otros fieles el viernes por la noche cuando apuñaló a dos agentes y gritó "infiel", afirmó el portavoz de la policía nacional Rikwanto cuyo nombre, como el de muchos indonesios, se compone de una única partícula.
El autor se precipitó inmediatamente después hacia una estación de autobuses cercana y rechazó rendirse.
"Insistió en amenazar con atacar(nos) con una bayoneta. Después de disparar unos cuantos tiros de advertencia, fue abatido en el lugar", declaró Rikwanto.
Los dos oficiales de policía fueron apuñalados en el cuello y en la cara y estaban siendo atendidos en un hospital local.
El motivo y la identidad del atacante todavía se están estudiando, indicó el portavoz de la policía Setyo Wasisto a la AFP el sábado.
Indonesia ha asistido a una serie de ataques menores desde enero del año pasado, llevados a cabo por simpatizantes del grupo yihadista Estado Islámico (EI), en su mayoría contra la policía.
El de este sábado fue el segundo ataque contra la policía en una semana.
El pasado domingo, dos supuestos militantes del grupo EI atacaron la comisaría central de la policía de la provincia de Sumatra Septentrional, matando a un policía. En mayo, tres policías fueron abatidos en un doble atentado suicida en una estación de autobuses de Yakarta.