El aumento de los cultivos ilícitos en Colombia se ha visto reflejado en el incremento del consumo y las incautaciones de droga proveniente de este país en Estados Unidos en 2016. Así lo revela un informe de la DEA que fue conocido el día de ayer. El organismo considera que una de las razones de esta situación es la suspensión de las fumigaciones aéreas.
La DEA (Administración para el Control de Drogas) aseguró en su informe que el 92% de la cocaína incautada en Estados Unidos viene de Colombia, el 6% de Perú y el 2% de Bolivia.
Señala en su informe que el movimiento de cocaína proveniente de Suramérica “ha alcanzado niveles récord” entre 2014 y 2016, especialmente en pequeñas cantidades que son transportadas por el Pacífico.
Según el informe, el suministro de cocaína en el país del norte es el más alto desde el año 2007, y el consumo es el más alto desde el 2009. En una zona denominada U.S. Transit Zone (Zona de Tránsito de Estados Unidos), que mide 42 millones de millas e incluye áreas del Pacífico y el Caribe, el flujo de esta droga es el más alto desde que existen estos registros.
Además, con base en modelos para análisis de datos de la DEA, previó que el consumo y el suministro de cocaína continuará aumentando en este país en el futuro cercano por varios factores asociados con Colombia, entre ellos, la eliminación de la fumigación aérea, la reducción de la erradicación manual que alcanzó el año pasado su nivel más bajo desde 1996, a los bloqueos que han hecho comunidades para impedir la acción de las autoridades y la siembra en zonas de difícil acceso como parques nacionales y reservas indígenas.
“El cultivo colombiano de coca y la producción de cocaína en 2016 alcanzaron los niveles más altos de la historia”, indica el informe tras añadir que “Colombia cuenta con un 134% de crecimiento en la agricultura de cultivo entre 2013 y 2016, de 80.500 hectáreas (ha) a 188.000 ha. Este incluye el doble de dos años de un solo año”.
La DEA indica que la producción potencial de cocaína de exportación el año pasado en Colombia fue a un nivel antes no registrado: un 35 % más que en 2015 y más de tres veces superior a la de 2012.
Indica también que los cultivos ilegales en Colombia venían siendo atacados con éxito por los esfuerzos de las autoridades a través de la erradicación manual y la aspersión aérea.
Igualmente afirma que la negociación de paz con las Farc es otro de los factores a tener en cuenta, al considerar que la guerrilla promovió el cultivo ilegal motivando a los campesinos con subsidios y beneficios que les llegarían al término del proceso.
Según la Encuesta Nacional de Uso de Drogas de 2015 Salud (Nsduh), el año más reciente para el que se dispone de datos en ese país, hubo un aumento del 26 por ciento en el número de consumidores nuevos de cocaína de 12 años o más, de 766.000 iniciados en el año 2014 a 968.000 iniciados en el año pasado.
Presión de Washington
Con la llegada del gobierno de Donald Trump se intensificó la presión de Estados Unidos a Colombia para que reduzca los cultivos ilícitos, que llegaron a 188 mil hectáreas en 2016, según las cifras de la Casa Blanca.
En su visita en mayo pasado a Estados Unidos, el presidente Santos explicó a Trump su plan para reducir los cocales, fundamentado en la erradicación manual forzada y la sustitución concertada con los campesinos. De esta forma se espera erradicar este año 100 mil hectáreas.
No obstante, el vicepresidente estadounidense Mike Pence reiteró a Santos hace dos semanas en Cartagena que "nuestra gran preocupación (...) y lo hablamos es el aumento dramático en la producción de cocaína que ahora está en altísimos niveles que no se habían visto con antelación…Señor presidente esto tiene que terminar, y esto tiene que terminar pronto", enfatizó.
Por su parte, el presidente Santos dijo que la erradicación de los cultivos ilícitos es una tarea titánica, pero Colombia la va cumplir.
El Mandatario declaró que Colombia es consciente “del aumento de los cultivos ilícitos en estos últimos años. Y esa es una preocupación compartida, porque tenemos una responsabilidad compartida”, sostuvo.
Indicó que la terminación del conflicto con las Farc permitirá “ser mucho más efectivos en esa lucha común que tienen nuestros dos países contra el narcotráfico”.
Precisó que, tal como le contó al vicepresidente Pence, está en marcha el plan específico para desaparecer, en una primera fase de erradicación forzosa, 100 mil hectáreas de coca, de las cuales ya van 27 mil hectáreas.
Y la otra mitad se está erradicando mediante sustitución voluntaria y ya se han arrancado 12 mil hectáreas, aunque más de 86 mil familias están comprometidas para superar las 50 mil hectáreas propuestas.
“Lo estamos midiendo cada semana con la ayuda de la propia embajada de los Estados Unidos, con el fin de garantizar su cumplimiento. Es una tarea titánica, pero la vamos a cumplir”, puntualizó.
El Jefe del Estado destacó el hecho de que la agenda entre los dos países haya evolucionado “mucho más allá de la lucha contra el narcotráfico”.