Wall Street terminó en baja marginal la sesión del viernes, en la que ni los datos de inflación ni las declaraciones de la presidenta del banco central estadounidense motivaron a los inversores.
Según los resultados definitivos de cierre, el índice principal Dow Jones Industrial Average bajó 0,29%, o 53,72 puntos, y cerró en 18.232,02 unidades.
El Nasdaq, dominado por los valores tecnológicos, terminaba estable (-0,03%), tras perder 1,43 punto a 5.089,36 unidades.
El índice ampliado S&P 500, considerado el más representativo de la tendencia general, terminó en 2.126,06 puntos tras un retroceso de 0,22%, o 4,76 unidades.
"Fue una sesión típica de víspera de fin de semana largo, con pocos volúmenes", comentó Peter Cardillo, de Rockwell Global Capital.
"Nada indica que el mercado esté pronto para hundirse o subir fuertemente", añadió.
Pocas horas antes del final de la sesión, un discurso de la presidenta de la Reserva Federal (Fed, banco central) Janet Yellen tampoco movilizó a los operadores, pese a que planteó el riesgo de "sobrecalentamiento" de la economía si se demora mucho en subir las tasas de interés.
A inicios de la jornada los inversores recibieron un indicador de inflación conforme a lo esperado, pese a que -sin incluir energía y alimentación- los precios al consumo de abril subieron un poco más de lo previsto en ritmo mensual (0,3%).
"Pero este pequeño impulso no nos acerca a un alza de las tasas", estimó Cardillo.
De todas formas, dada la poca cantidad de inversores en el mercado el viernes, recién el martes, día siguiente al feriado en honor a los soldados muertos en combate (Memorial Day), el mercado podrá reaccionar verdaderamente a las afirmaciones de Yellen.
Según Yellen, la Reserva Federal deberá "en algún momento de este año" comenzar a subir sus tasas directrices, cercanas a cero desde fines de 2008. Advirtió además que no hacerlo podría "sobrecalentar" la economía.
La jefa de la Fed se abstuvo sin embargo de referirse al nivel actual de los mercados de acciones, que han marcado niveles récord en las últimas sesiones, pese a que hace dos semanas había sorprendido al advertir a los inversores sobre la excesiva valorización de los mercados, estimando que planteaba "potenciales peligros".
Los inversores temen que un incremento de las tasas pueda frenar la inversión y las exportaciones, al encarecer el dólar.
En el mercado de obligaciones, el rendimiento de los bonos del Tesoro a 30 años terminó casi estable a 2,985%, contra 2,986% el jueves, mientras que el de los bonos a 10 años subió a 2,210% contra 2,186% previamente.