¿Volverá Ingrid Betancourt al país a hacer política? | El Nuevo Siglo
Viernes, 11 de Octubre de 2013

POR QUE SI

1.       Símbolo de las víctimas

Uno de los aspectos más importantes que jugaría a favor de una posible aspiración política es su condición de víctima del secuestro en Colombia. Los seis años que pasó privada de la libertad en poder de las Farc, los vejámenes de los que fue objeto, la movilización internacional a su favor y su posterior liberación en la Operación Jaque, la convirtieron en uno  de los símbolos más importantes de la violencia en el país. Betancourt entraría a llenar este espacio en el que a pesar de haber muchos actores con aspiraciones políticas, su reconocimiento le aseguraría su participación. Su respaldo al proceso de paz entre el Gobierno y las Farc, también juega como otro punto a su favor.

 

2. Reconocimiento

Ingrid Betancourt es una figura pública que cuenta con el reconocimiento de la ciudadanía. Fue representante a la Cámara en 1994 y senadora en 1998 cuando sacó la más alta votación a esta Corporación con 150.000 sufragios. En su etapa como congresista fueron conocidas sus denuncias contra la corrupción. Tras renunciar a su curul en 2001 presentó su aspiración para llegar a la Presidencia en la campaña de 2002 por el partido Verde Oxígeno. De lanzarse nuevamente al Senado, competiría con pesos pesados de la política nacional como el expresidente Álvaro Uribe y el exministro Horacio Serpa.

 

3. Independencia

Su carácter independiente y transparente le aseguraría su ingreso como una opción a la presidencia de la tercería conformada por la Alianza Verde. Capturaría la franja del voto de opinión ante la polarización que hay en el país entre el presidente Juan Manuel Santos y el Uribe Centro Democrático del expresidente Álvaro Uribe.

 

POR QUÉ NO

1.    Impopularidad

Su salida del país tras su liberación en julio de 2008 para radicarse en Europa con la idea de recuperar su tranquilidad, así como la demanda que interpuso contra la Nación por la responsabilidad en su secuestro le generaron el rechazo de una gran parte de los colombianos. Estas decisiones le cambiaron su imagen de víctima de la violencia por la de una mujer que desconoció los esfuerzos que tanto el Gobierno de la época como la sociedad civil, hicieron por su regreso.

 

2.    Contradicciones

Las contradicciones políticas jugarían en contra de una posible precandidatura de Betancourt por la tercería conformada por la Alianza Verde. A pesar de las semejanzas ideológicas con la propuesta de esta colectividad, su apoyo a la relección del presidente Juan Manuel Santos no encajaría con una posible candidatura por la tercería, ya que esta opción descarta de plano la continuidad del actual jefe de Estado. En una futura aspiración política, además de enfrentarse al partido del Presidente que la liberó de su secuestro y del ministro de Defensa que encabezó dicho operativo, disputaría los votos con el Uribe Centro Democrático y con el partido de La U.

 

3.    Exsecuestrados quemados en política

Los intentos de los dirigentes políticos que han intentado volver al Congreso después de salir del secuestro no han sido buenos. Tras las liberaciones  unilaterales de 2008 y 2009 por parte de las Farc, de los cinco exsecuestrados que se presentaron a las elecciones parlamentarias de 2010, solo dos fueron elegidos. Los quemados fueron Sigifredo López, Clara Rojas, Luis Eladio Pérez y Orlando Beltrán. Solo quedaron Consuelo Gonzáles y Jorge Eduardo Géchem.

 

 

 

La puerta abierta

En entrevista a diferentes emisoras, la excandidata presidencial Ingrid Betancourt dijo que está “reflexionando” sobre la posibilidad de volver a la política, incluso en el marco del proceso electoral de 2014.

Betancourt, quien se encuentra cursando un doctorado en Teología en la universidad inglesa de Oxford, dijo a La FM que “un grupo de amigos se han acercado (porque) quieren reflexionar en la posibilidad de que yo vuelva a la política (...) relacionado con el tema de las próximas elecciones”.

Agregó que “obviamente es una reflexión que hay que tener, pues no podemos sustraernos a lo que es el futuro de Colombia, porque este es un momento muy importante”, añadió Betancourt, destacando que “varios sectores” la han llamado para hacerle propuestas.

No detalló a cuál de los dos procesos le han propuesto presentarse e insistió en que la decisión de volver a hacer política en Colombia “es difícil” y le crea “preocupación”  tanto a ella como a su familia.

“El tema con el que sí estoy obsesionada es que no vayamos a perder la oportunidad de esta generación de hacer la paz, porque la paz se nos puede resbalar de las manos como un jabón", aseguró.

En otra entrevista que concedió a Blu Radio, dijo que está “convencida del proceso de paz” que mantiene el gobierno con las Farc desde noviembre de 2012 en La Habana y que “le gusta” que el presidente Juan Manuel Santos tenga la oportunidad de ser reelegido en 2014. “A mí sí me gusta la reelección del presidente Santos, y me gusta porque me parece que el presidente Santos ha unido unas cualidades difíciles de unir, que son las de ser un excelente guerrero, de ser un gran ministro de Defensa que derrotó militarmente a las Farc y les dio la posibilidad de pensar en sí mismas en un proceso de paz”, destacó.

Finalmente, Betancourt dijo que buscará la forma de apoyar la paz y que en ese sentido tiene que “valorar si una participación política aportaría algo más”.