La violencia de las pandillas y el narcotráfico ha convertido en desplazados internos a un millón de personas en Centroamérica y México, según un informe presentado eeste miércoles que revela que el conflicto colombiano sigue haciendo huir a miles.
El "Informe mundial de desplazamiento interno", elaborado por un departamento especializado del Consejo Noruego de Refugiados (NRC), estimó que, en 2015, hubo 27,8 millones de nuevos desplazados internos en el mundo por culpa de las guerras y la violencia, pero también por los desastres naturales.
"Dicho de otra manera, unas 66.000 personas abandonaron sus hogares cada día de 2015", dijo Jan Egeland, secretario general del NRC.
Esta cifra contribuyó a elevar a 40,8 millones el número de desplazados internos en el mundo sólo por la violencia, gente que escapa de sus hogares pero sin irse del país, y que es el doble del número de refugiados, según los autores del informe.
Pese a las negociaciones de paz entre las Farc y el gobierno de Juan Manuel Santos, "el largo conflicto armado de Colombia, y la violencia perpetrada por grupos que el gobierno identifica como bandas criminales, provocó 224.000 casos de nuevos desplazamientos internos en 2015", reveló el informe.
De este modo, según el NRC, el número de desplazados internos en Colombia ascendía a finales de 2015 a 6,3 millones de personas, el segundo país del mundo por detrás sólo de Siria (6,6 millones).
En Centroamérica y México, a finales de 2015 el número de desplazados era de 1 millón de personas, contra 848.000 a finales de 2014, "muchos de ellos huyen de ciudades que sufren las tasas de homicidio más altas del mundo y niveles de violencia comparables con los de una zona de guerra", afirma el informe del Centro de monitoreo de desplazados internos (IDMC) del Consejo Noruego de Refugiados.