El sector automotor colombiano se ha convertido en uno de los principales jalonadores de la industria local, como lo demuestra que entre el 2000 y el 2012 las ventas totales se incrementaron 423 por ciento.
De acuerdo a los reportes del mercado, al cierre del año anterior el parque automotor estaba conformado por 4.107.927 vehículos, sin incluir motocicletas; por su parte, en los primeros cinco meses de 2013 se habían vendido 116.693 unidades.
Sin embargo, este incremento en las ventas ha estado jalonado también por las colocaciones en otros países donde la industria nacional ya comercializa vehículos.
Precisamente, el Ministro de Comercio, Industria y Turismo, Sergio Díaz-Granados, al señalar que antes de 2010, casi 90% de las exportaciones colombianas correspondientes a este rubro se dirigía a Venezuela y Ecuador, mientras que hoy el panorama es bien diferente.
“En la actualidad estamos incursionando en más de diez mercados, lo que refleja la diversificación que estamos logrando en este campo”, señaló al recordar que el año pasado se vendieron 25.798 unidades a los siguientes destinos: México (43,17%), Ecuador (28,8%), Perú (9,96%), Argentina (8,78%), Chile (4,36%), Venezuela (2,13%), Guatemala (1,20%), Panamá (1,2%) y otros (1%).
En su concepto, es de destacar que países caracterizados por una industria automotriz robusta y competitiva como México y Argentina, hoy sean dos de los destinos a los que llegan los vehículos que se producen en Colombia.
Al subrayar que esta actividad no solo se constituye como uno de los sectores líderes y una de las locomotoras para el desarrollo, dijo también que esta hace parte del Programa de Transformación Productiva (PTP), a través del cual se vienen adelantando diferentes proyectos tendientes a su crecimiento y consolidación, como el Centro de Desarrollo Tecnológico de la Industria Automotriz, el cual se convertirá en su motor de innovación y competitividad.
Con el fin de seguir fortaleciendo la actividad, el Presidente Juan Manuel Santos anunció recientemente varias medidas, entre ellas una tarifa arancelaria preferencial a los bienes intermedios y a las materias primas destinadas a la fabricación de autopartes y ensamble de vehículos, a través de un decreto que ya está publicado en la página del Ministerio de Comercio y que se espera entre en vigencia en un año.
Díaz-Granados también mencionó condiciones especiales de financiación incluidas en el Plan de Impulso a la Productividad y el Empleo (PIPE), que en parte irán directamente al segmento de autopartes con recursos del PTP a través de Bancoldex.
En Colombia operan en forma activa y concentran 99% del mercado -en términos de unidades-, las ensambladoras Compañía Colombiana Automotriz (marca Mazda); General Motors Colmotores (marcas Isuzu, Volvo y Chevrolet); Sofasa (marca Renault); Hino Motors Manufacturing (marca Hino – grupo Toyota). También ensamblan, Carrocerías Non Plus Ultra (marca propia, CKD Volkswagen); la Compañía de Autoensamble Nissan (marca Nissan); y Navistrans S.A: Agrale y Daimler.
Sin embargo, el país ya entró en la era de producción total de carros con el inicio de operaciones de la nueva planta de Colmotores en la zona franca Zoficol, instalada en Bogotá, y donde se aspira a fabricar unas 60.000 unidades anuales inicialmente, tanto para el mercado doméstico como para el externo.
De acuerdo con el Ministro, el sector automotor colombiano se caracteriza por sus elevados estándares de calidad, alto nivel de formalidad laboral, la calificación de sus empleos y su remuneración, lo mismo que por los bajos índices de accidentalidad en las fábricas.
Adicionalmente, la producción de vehículos jalona otros subsectores como por ejemplo las industrias química, eléctrica y electrónica, siderúrgica, metalmecánica, cauchos, plásticos y vidrios, entre otros.