Venezuela: piden diálogo "sin presiones ni sanciones" | El Nuevo Siglo
Martes, 3 de Junio de 2014

La Organización de Estados Americanos (OEA) inauguró el martes su 44 Asamblea Anual en Asunción, con un llamado a reducir la desigualdad en América Latina y que el crecimiento de la región se traduzca en inclusión social.

El secretario general, José Miguel Insulza, defendió la "fuerza, vitalidad y relevancia" del organismo en momentos en que se cuestiona su vigencia, pidió apoyar "sin presiones ni sanciones" el diálogo entre la oposición y el Gobierno de Venezuela y destacó "la riqueza" del también criticado sistema Interamericano de Derechos Humanos.

"Nuestra región ha cambiado para bien en sus economías, en crecimiento, pero el desafío es la inclusión social, ese es el primer y gran desafío de nuestro hemisferio", dijo Insulza al inaugurar la asamblea que se desarrollará hasta el 5 de junio.

La inclusión, el aborto, la homosexualidad y hasta la legalización de la marihuana han sido temas discutidos en acalorados debates previos al inicio del encuentro.

"Si nuestra región quiere progresar en su desarrollo democrático y tener un crecimiento integral sano, debe hacerse cargo hoy de cuatro desafíos políticos urgentes: la inclusión social, la seguridad pública, la defensa de los derechos humanos y la expansión de la democracia y el Estado de derecho", dijo Insulza.

El secretario general defendió "la fortaleza y la vitalidad" de la OEA y recalcó que el organismo celebra la creación de los múltiples bloques de integración que han surgido en la región. "No estamos para competir, sino para colaborar" con los demás bloques, indicó.

"Nunca deja de sorprenderme, en esta era de tantas Cumbres, la permanencia y relevancia que reviste esta Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores", subrayó.

- Sin consenso sobre la discriminación -

La discriminación sexual y el derecho al aborto encendieron el martes los debates previos a la inauguración de la Asamblea.

Opositores y defensores de estas causas protestaron en las afueras de la sede de la Conmebol en Asunción, donde se desarrollan las reuniones, y tuvieron cruces al interior de la sala, en la que los activistas reclamaron "apegarse a la Carta Interamericana de Derechos Humanos que está en contra cualquier tipo de discriminación".

La exclusión de las minorías fue uno de los temas dominantes, luego que Paraguay decidiera no respaldar una declaración impulsada por Brasil, con el apoyo de Argentina, Colombia, Estados Unidos y Uruguay, para condenar la violencia contra los homosexuales y exhortar a los Estados a tomar medidas contra la discriminación.

"Tenemos que actuar contra todas las formas de discriminación, y no podemos dejar afuera de estas acciones las comunidades homosexuales y LGTB", dijo Carmen Lomellin, representante permanente de Estados Unidos ante la OEA.

En ese sentido, el representante de Uruguay, Milton Romani, fue aplaudido y vitoreado cuando defendió "la igualdad de derechos para los homosexuales como en (su) país", dijo.

Además, en ese sentido, Romani hizo referencia a la reciente despenalización del aborto en Uruguay, en 2012.

"En mí país, al primer año de legalización del aborto, no aumentó el número de interrupciones del embarazo ni hubo muertes por aborto", dijo inyectando energía al debate.

- Venezuela en el umbral -

Aunque el tema de Venezuela no figura entre los asuntos a tratar el miércoles en las sesiones plenarias, Insulza pidió a la comunidad internacional apoyar el diálogo entre la oposición y el Gobierno de Venezuela "sin presiones ni sanciones", aunque expresó su preocupación por el estancamiento de este proceso.

Este fue el primer pronunciamiento del organismo luego que el miércoles la cámara baja del Congreso estadounidense aprobara sanciones contra funcionarios de Venezuela por supuestas violaciones de derechos humanos durante las manifestaciones antigubernamentales que ya dejan 42 muertos. El proyecto debe aun pasar por el Senado antes de convertirse en ley.

El canciller venezolano Elías Jaua, quien estará presente en la sesión plenaria del miércoles, advirtió a mediados de mayo que su país denunciará ante la ONU y la OEA la "injerencia" de Washington y sus "amenazas" de sanciones en el marco de la crisis política que vive el país.

Roberta Jacobson, subsecretaria adjunta del Departamento de Estado norteamericano para el Hemisferio Occidental, expresó su rechazo a cualquier tipo de sanción contra Venezuela./AFP