La mayoria opositora del Parlamento Venezolano separó este miércoles a tres de sus diputados como lo ordenó un fallo judicial que declaró nulas las decisiones de la Asamblea mientras se mantuvieran incorporados esos legisladores impugnados por el oficialismo.
Apenas iniciada la sesión ordinaria, la bancada opositora votó para aprobar una carta en la que los tres diputados suspendidos por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) solicitaron a la Asamblea Nacional su desincorporación para defenderse judicialmente de las acusaciones de fraude electoral.
"No tenemos ningún problema en decirlo, que quede constancia de que cumplimos, acatamos y observamos" la decisión del TSJ, anunció el presidente legislativo, el enconado antichavista Henry Ramos Allup, tras protestas en el hemiciclo de diputados oficialistas que exigían que ese acatamiento constara en actas y no quedara sólo en la aprobación de la carta.
El TSJ, según la oposición aliado del gobierno, declaró el lunes nulos todos los actos del nuevo Parlamento mientras siguieran incorporados los diputados opositores del estado Amazonas, cuya elección fue suspendida temporalmente por ese órgano en diciembre al admitir una impugnación presentada por el partido de gobierno.
La corte también había considerado en desacato a la directiva opositora de la cámara, por haber juramentado, hace una semana, un día después de la instalación del nuevo Legislativo, a los tres legisladores, desatando una crisis institucional en el país petrolero.
Con la decisión de este miércoles, la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) pierde temporalmente la mayoría ultracalificada de dos tercios (112 de 167 curules) que ganó en los comicios históricos del 6 de diciembre.
Esa mayoría ultracalificada le daba amplio poder para avanzar en su objetivo de buscar una vía para cambiar al gobierno, aprobar una amnistía para presos políticos y reformas económicas.