La oposición venezolana activará un operativo para informar a sus seguidores sobre el estado de las firmas para activar un referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro, previo a un proceso de validación de rúbricas que iniciará el 20 de junio.

El líder opositor Henrique Capriles indicó este domingo que el lunes, martes y miércoles habrá puntos de información en todos los estados de Venezuela para que quienes apoyan el revocatorio consulten si su firma superó el primer filtro del Consejo Nacional Electora (CNE) y deba ser validada ante el árbitro electoral.

El ex candidato presidencial dijo que "habrá una reunión de la Unidad (MUD, coalición opositora) para buscar la forma de tener desplegados en las capitales (de los estados) puntos de información".

El CNE anunció el viernes que debía corroborarse 1,3 millones de firmas de las 1,8 millones recogidas para intentar activar un revocatorio contra Maduro. Las casi 600.000 rúbricas rechazadas incluye las de notorios dirigentes opositores, como el propio Capriles o el encarcelado Leopoldo López.

El próximo jueves, la oposición realizará actos en la calles para reclamar por los "excluidos" del referendo.

"El jueves tendremos una movilización en todos los estados de Venezuela: asambleas, concentraciones, movilizaciones con todos los excluidos, porque a todos les daremos tareas para la validación a partir del lunes 20", aseveró Capriles en un acto opositor con varios centenares de personas, en las que la gran mayoría afirmó que sus firmas fueron rechazadas.

Consultado sobre la amenaza del chavismo de demandar la nulidad del referendo, Capriles dijo este domingo a la AFP que no presta atención a "las amenazas de Maduro" porque "Venezuela tiene demasiados problemas".

"Es la típica reacción de que le tiene miedo al pueblo; él le tiene terror al revocatorio porque sabe que el pueblo quiere cambio", agregó.

Insistió en que el referendo debe realizarse este año, pese a que Maduro dijo el sábado que solo habrá tiempo para un referendo en 2017.

Si el referendo se realiza antes del 10 de enero de 2017, y Maduro pierde, se deben convocar elecciones presidenciales. Si tiene lugar después de esa fecha, el vicepresidente -designado por Maduro- asumirá el cargo hasta 2019.