Con las medidas económicas adoptadas por el gobierno de Estados Unidos en contra de Venezuela, la situación para los empresarios colombianos que comercian con el país bolivariano podría empeorar por iliquidez
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Con las sanciones económicas impuestas por el gobierno del presidente Donald Trump a Venezuela, la situación para las exportaciones colombianas hacia el mercado bolivariano se complica.
Ante la falta de liquidez de Venezuela, muchos empresarios contemplan la posibilidad de entregar solo productos cuando el dinero esté asegurado, con el fin de evitar que se registren moras en los pagos.
El comercio binacional entre Colombia y Venezuela fue uno de los más dinámicos de la región, tanto así que el vecino país llegó a convertirse en el mayor comprador de productos colombianos durante la primera década de esta centuria.
Era tal la vitalidad del intercambio comercial entre los dos países, que la balanza comercial era favorable a Colombia en 2008, y se ubicaba cerca de US$6.000 millones.
Un reporte del Banco de la República indica que la evolución del comercio bilateral entre 1995 y 2009, el comercio permaneció en niveles inferiores a los US$1.000 millones con altibajos hasta 2003.
Es después de ese año, cuando inició el proceso de mayor crecimiento de su historia. Este crecimiento ha estado liderado por las ventas de productos colombianos, con lo cual se ha consolidado una balanza comercial muy favorable a nuestro país, que en 2008 alcanzó los $5.117 millones. Las compras de Colombia al vecino país, que hasta 1999 eran superiores a nuestras ventas, han venido disminuyendo a partir de 2006.
"La caída en el comercio entre Colombia y Venezuela en los cinco primeros meses del año fue de 53% frente a igual periodo de 2016"
Al tiempo que esto ocurría, las importaciones venezolanas en general se incrementaron sustancialmente. Pasaron de US$14.689 millones en 2000 a $48.000 millones a finales de 2008. Es decir, aumentaron en 185% este lapso de nueve años bajo el mandato de Chávez.
Deterioro
Pero la profundización de la revolución y la desestabilización de la economía colombiana luego de la muerte de Hugo Chávez, trajo como resultado un abrupto y severo recorte a las importaciones desde Colombia, y obviamente a los pagos que desde ese país se debían realizar a los empresarios nacionales.
La deuda fue alta, superó los US$1.000 millones y los empresarios colombianos tuvieron que buscar la forma de realizar los cobros, muchos negociaron para lograr acuerdos, otros decidieron abandonar el mercado.
Comercio 2017
La caída en el comercio entre Colombia y Venezuela en los cinco primeros meses del año fue de 53% frente a igual periodo de 2016 según las cifras más recientes de la Cámara de Integración Económica Venezolano-Colombiana Cavecol.
Al cierre de mayo el intercambio comercial bilateral llegaba a los US$216 millones, mientras que un año atrás registraba movimientos por US$462 millones.
Durante el período enero – mayo de 2017, las exportaciones venezolanas hacia el vecino país se incrementaron un 4% al llegar a la cifra de US$94 millones, en comparación con los US$90 millones acumulados durante el mismo período del año 2016.
Por otra parte, las importaciones de productos colombianos a Venezuela, cayeron 67% en el 2017 respecto al período enero – mayo del año 2016, alcanzando una cifra de US$123 millones.
En el caso de los principales productos Exportados hacia Colombia, durante el período enero – mayo del presente año, se tiene el 34% representado en el capítulo 31 del arancel de aduanas conformado por Abonos y el 16% en el capítulo 39 correspondiente a las Materias plásticas y manufacturas.
La participación porcentual de los principales grupos de productos colombianos según capítulo del arancel de aduanas importadas durante el primer bimestre de 2017, evidencia que el 26% del total pertenece a azúcares y artículos de confitería.
En segundo lugar están los aparatos y material eléctrico, con 10,1%; seguido de grabación o imagen, con 5,5% en el capítulo de materias plásticas y manufacturas.
Los productos que presentaron una menor participación son los pertenecientes al capítulo conformado por combustibles y aceites minerales y sus productos con 1% y al capítulo correspondiente a fundición, hierro y acero, con un 0,6%.
Sanciones
Sobre las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos a Venezuela, el economista Rafael Quiroz, experto en petróleo, considera que la decisión afectará la situación financiera y "el flujo de caja" del Gobierno y de PDVSA.
"Si Venezuela decide emitir una nueva deuda no puede contar con ninguna empresa norteamericana o de otro país que tenga actividades financieras en Estados Unidos (...). Va a presionar mucho al Gobierno, que se va a sentirse mucho más acorralado", dijo.
La caída de los precios del petróleo desde 2014 ha afectado severamente a Venezuela, que obtiene del crudo 96% de sus ingresos en divisas.
"Vamos a disponer de menos divisas para importar alimentos y medicinas. La escasez aumentará", afirmó Quiroz.
La dura crisis económica que asfixia a los venezolanos se caracteriza por el desabastecimiento de alimentos y medicinas y una severa inflación que podría cerrar este año en 720%, según el FMI.
La deuda venezolana está estimada en más de US$100 mil millones, mientras sus reservas internacionales se han reducido a US$10 mil millones, la mayoría en lingotes de oro.
"Los problemas de flujo de caja cualquier entidad económica los soluciona con deuda. Entonces (Estados Unidos) le cierra las posibilidades de financiamiento a la economía venezolana", indicó en entrevista a la televisora estatal VTV.
Pero el economista Henkel García, director de la firma Econométrica, señaló que el efecto de estas sanciones será "limitado".
"El problema crecería si Estados Unidos toma alguna medida sobre las exportaciones de Venezuela a ese país", indicó.
La agencia de calificación financiera SP Global Ratings advirtió sobre el riesgo de impagos debido al deterioro de las condiciones económicas y el aumento de las tensiones políticas en Venezuela.
Para Jason Marczak, del centro de estudios latinoamericanos del Atlantic Council, grave sería agregar a Pdvsa al listado de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro, lo cual bloquearía todos sus fondos y propiedades bajo jurisdicción de Estados Unidos.
Hasta ahora, las sanciones buscan "obligar al Gobierno a cambiar su posición y respetar la Constitución y las bases de la democracia", no a agudizar la crisis humanitaria, como afirma Maduro, dijo.
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