Un Ferrari 250 GTO Berlinetta de 1962 pulverizó la noche del jueves el récord del automóvil más caro jamás vendido en una subasta, al alcanzar los 38 millones de dólares durante un evento celebrado en California (oeste de Estados Unidos), informó la prensa local.

El anterior récord lo tenía un Mercedes-Benz W196 de 1954, que fue adquirido el año pasado por 30 millones de dólares en Inglaterra.

El Ferrari, subastado en la semana del automóvil de Monterrey (cerca de San Francisco), es un biplaza rojo -el emblemático color de la fábrica italiana- de la colección Maranello Rosso, con el número de chasis 3851 GT.

El coche, cuyo ensamblaje terminó el 11 de septiembre de 1962, fue entregado al corredor francés Jo Schlesser, quien ese año participó en el Tour de Francia de automóvil con el exesquiador y medallista olímpico galo Henri Oreiller, según la casa de subasta Bonhams.

Oreiller falleció en octubre de ese año durante una carrera en el circuito de Montlhery, al sur de París.

Tras el siniestro, el vehículo pasó a manos de Fabrizio Violati, miembro de una adinerada familia italiana, que durante décadas lo usó para participar en carreras de coches clásicos.

El automóvil pertenecía desde junio a un grupo inversor, que desembolsó entre 150 y 200 millones de dólares en vehículos de colección.

El responsable de la subasta, Robert Brooks, de la casa Bonhams, no reveló el nombre del comprador.

Algunas de las celebridades que tienen un Ferrari 250 GTO son el diseñador Ralph Lauren, el baterista de Pink Floyd Nick Mason y el heredero de la cadena Wal-Mart Rob Walton, de acuerdo con el diario Los Angeles Times.