La plana mayor del llamado “Uribismo pura sangre” se reunió en la tarde del viernes, en la Bella Villa, para afinar los detalles finales de un hecho político de la mayor trascendencia en Antioquia: La adhesión, en bloque, a la candidatura de Luis Pérez Gutiérrez a la Alcaldía de Medellín, de cara a las elecciones del 30 de octubre próximo.

¿Tiene beneplácito de Uribe? Lo que falta por establecer es si tal decisión cuenta con el respaldo del ex presidente Uribe, puesto que afecta directamente al candidato de la U, Federico Gutiérrez.
Alfázar González, quien trabajó en Casa de Nariño durante el pasado Gobierno, le contó a La Barca que entre los adherentes a la aspiración de “Lupe” figuran Jaime Jaramillo Panesso, José Obdulio Gaviria, Pablo Arango, Alberto Rendón y Libardo Botero, quienes protocolizarán este sábado su respaldo formal al proyecto político del ex alcalde, quien celebró alborozadamente la llegada a su campaña de los más cercanos amigos del ex presidente y de 95% de los conservadores para enfrentar cómodamente a Aníbal Gaviria el último domingo de octubre.

Envainado el “Buen Gobierno”. La Auditoría General de la República acaba de difundir un informe de 26 folios sobre la gestión desarrollada por la Fundación Buen Gobierno de Antioquia, creada por el Politécnico Jaime Isaza Cadavid y el IDEA. Esta entidad registra enormes irregularidades en materia de contratación administrativa, para la que se prestó eludiendo la Ley 80 de 1993. Las múltiples irregularidades detectadas tienen que ver con el desarrollo de los contratos y la ejecución presupuestal.
El informe de la Auditoría General ya ha sido puesto en conocimiento de la Procuraduría General de la Nación y de la Contraloría General de la República. También fue conocido de antemano por la Procuraduría Regional de Antioquia, donde no se le prestó ninguna atención.

Fin de la luna de miel. El gobierno del presidente Santos también terminó su luna de miel con el ex jefe del liberalismo oficialista César Gaviria. Sucedió en Cartagena, en el Congreso de Fasecolda, en donde el estadista pereirano les dijo a los aseguradores que había que hacer más política económica, dirigiéndose directamente al ministro de Hacienda Juan Carlos Echeverry.
Gaviria también denunció en el mismo escenario que el tema agrícola estaba descuidado y achacó al Superintendente de Salud los males que agobian al sector.

El delfín también ataca. Asimismo, Simón Gaviria, hijo del ex presidente liberal, puso contra las cuerdas, en plenaria de la Cámara, al ministro Juan Camilo Restrepo, en un candente debate en el que le formularon más de cien preguntas. Cuando llevaba 45 minutos hablando, fue recriminado por el joven Simón, en su condición de Presidente de la corporación, diciéndole, reloj en mano, que le quedaban 15 minutos; luego le advirtió que le quedaban cinco, ocasionando el desespero del Ministro, quien expresó que el trato que recibía era inelegante, pues estaba preparado para hablarles a los Representantes durante cinco horas.
La familia Gaviria marca distancia con el gobierno de Santos.