El éxodo podría crecer en caso de que el chavismo gane las elecciones e incluso si gana la oposición el regreso de esta población no sería inmediato. Por ello hay voces que creen que el Gobierno debería solicitar ayuda internacional para atender esta avalancha, como se ve en Europa con los migrantes

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Cada vez más crece la migración de venezolanos a Colombia producto de la crisis social y económica en su país. Aunque muchos están de paso hacia naciones del sur del continente, miles deciden quedarse en busca de oportunidades de vida o simplemente porque no tienen dinero para seguir su camino. Ya son más de medio millón de esta población que se ha desperdigado, especialmente en la frontera en Cúcuta y las principales capitales, a la par crecen los problemas porque la atención que ha ofrecido el gobierno Santos no da para tantos.

Expertos consultados por EL NUEVO SIGLO señalaron que Colombia sola no puede atender este éxodo y por ello debería pedir ayuda internacional.

En octubre pasado el director General de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento, reveló la presencia de 470 mil ciudadanos venezolanos, entre regulares e irregulares.

La cifra dio cuenta que a esa fecha había más de 202 mil venezolanos de forma regular en el territorio colombiano.

La llegada masiva de venezolanos a Colombia ya es un drama humanitario que se manifiesta de manera más evidente por la presencia de cientos de personas, adultos y niños, viviendo en las calles o en parques de Bucaramanga o Cúcuta, entre otros. También se les ve durmiendo en terminales terrestres y aéreas.

Ello ha llevado incluso a enfrentamientos con los ciudadanos colombianos, que reclaman porque por ejemplo en Cúcuta sus niños no tienen dónde jugar debido a los parques ocupados.

Esta situación  llevó a que ayer las autoridades adelantaran en Cúcuta la deportación masiva más grande de venezolanos desde que se inició esta migración hace cerca de tres años tras el cierre de la frontera, que afectó a 130 personas que permanecían en el país de manera irregular.

El operativo llevado a cabo en una cancha del sector de Sevilla en Cúcuta por personal de Migración Colombia y la Policía Nacional fue ordenado después de que un grupo de jóvenes colombianos intentó tomarse por la fuerza el escenario deportivo, incluso lanzando bombas molotov.

El alcalde de Cúcuta, César Rojas, dijo que el desalojo se hizo con el objeto de resguardar la vida de los venezolanos y de los ciudadanos colombianos en la zona. “Corren peligro ellos también porque hay agresividad por parte de los habitantes del sector", explicó.

Agregó el Burgomaestre que "ellos dicen que no pueden pasar por el sitio, que los venezolanos hacen sus necesidades allí y eso está enardeciendo la inseguridad. No puedo aceptar muertos por  cuenta de la xenofobia contra los venezolanos”.

Ayuda

El gobierno del presidente Santos ha tomado varias medidas frente a la creciente avalancha de venezolanos acosados por la inseguridad y la falta de alimentos.

Una de las primeras fue la expedición de un decreto para permitir a ciudadanos venezolanos esposos o compañeros permanentes de colombianos afectados por el cierre de la frontera, solicitar la nacionalidad colombiana.

Posteriormente fue adoptada la Tarjeta de Movilidad Fronteriza, exigida desde el 1 de mayo de 2017,  que les permite a los venezolanos transitar en los departamentos de la frontera como La Guajira, Cesar, Norte de Santander y Arauca.

Los venezolanos que quieran pasar al interior u otros departamentos de Colombia deberán ingresar con pasaporte vigente debidamente sellado.

Luego fue establecido el Permiso Especial de Permanencia (PEP), que permite a los venezolanos que se encontraban dentro del territorio colombiano el 28 de julio de 2017 permanecer dos años.

En este proceso creciente de la llegada de venezolanos a Colombia el presidente Santos señaló en abril pasado que "así debemos ser, solidarios con nuestros hermanos, y siempre seremos solidarios con nuestros hermanos, por eso una vez más llamo a que los colombianos adoptemos esa actitud, que no comencemos a culpar a los venezolanos, sobre todo en la frontera, de todos nuestros males, todo lo contrario, vamos a extenderles una mano solidaria y decirles hermanos estamos con ustedes”.

El Gobierno nacional ha autorizado prestar los servicios de salud y educación públicas a los venezolanos que han regulado su permanencia en Colombia.

Sobre el particular en noviembre pasado, la canciller María Ángela Holguín dijo que "(la llegada de venezolanos) complica el posconflicto en la medida en que los recursos que tiene el Estado. Tenemos que llegar a zonas del país a las que vamos a llegar con salud, vías, proyectos productivos, pues recibir a una gran cantidad de venezolanos esto genera un costo adicional grande”, dijo la Canciller.

No obstante la Canciller recordó que “ellos fueron muy generosos cuando Colombia atravesaba por un mal momento y no podemos no serlo ahora y entrar en la xenofobia. Hay que ser grandes y ayudar”.

ONU y OEA

El excanciller Fernando Araújo dijo que “pienso que se debe hacer un frente común con varios países de la región y con el apoyo de las entidades de la ONU que tienen que ver con los temas de migración y desplazamiento”.

Añadió que “así como hay problemas con migrantes en Europa y en otras partes, y se atienden con recursos de la ONU, pues aquí también deberían ayudar”.

Araújo que Colombia debe ayudar a los venezolanos en esta situación, pero puso de relieve que hay una gran  diferencia. “El éxodo de colombianos a Venezuela fue importante pero ocurrido durante varios años, de manera que la economía y la comunidad en Venezuela lo pidieron asimilar poco a poco. El hecho de que la migración de venezolanos ahora sea tan explosiva, nos obliga a buscar más ayuda. Lo que quiero decir es que el impacto sobre la economía y los colombianos es más alto”.

Por su parte, Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad  del Rosario, dijo que “la migración venezolana es uno de los fenómenos que va a transformar a Colombia. No es una cuestión pasajera”.

Añadió que este éxodo crecerá si gana el chavismo en las próximas elecciones presidenciales ante el desastre económico y político e incluso si ganara la oposición no significaría que regresen los que aquí están porque esperarían a que mejoren las condiciones económicas en su país.

Rodríguez dijo que “tenemos que ser solidarios con la migración venezolana, eso no significa ser permisivos y el Estado tampoco puede anteponer las necesidades internas y la relación bilateral con Venezuela a la migración”.

El experto consideró oportuno que Colombia solicite ayuda internacional para atender la masiva llegada de venezolanos, pero “se debería plantear, más que en organismos como la ONU, deberíamos buscar algo más local en lo cual podamos encontrar que se dé una política más articulada a los intereses colombianos”. Por ejemplo, expresó, “quizá la llamada a hacerlo sería la OEA”.

Cúcuta

El secretario de Seguridad Ciudadana de la ciudad de Cúcuta, Mauricio Franco, dijo a este Diario que “diariamente cruzan la frontera un promedio de 50 mil personas. De éstas hay quienes vienen a hacer trabajo informal, hay personas que vienen en tránsito para otras ciudades del país o para el sur del continente, y de esta manera poco a poco se van quedando aquí” porque muchos que tienen pasaporte, no cuentan con los recursos para transportarse”.
Franco dijo que se estima que en Cúcuta hay cerca de 20 mil venezolanos. “En calle, que duermen en la calle, terminamos una caracterización hace una semana que arrojó 910 personas, sin hablar del arribo indígena yukpa, que son del sur del lago de Maracaibo, que son alrededor de 500”.

El funcionario dijo que la administración municipal ha ayudado a esta población en la medida de sus posibilidades, pero la misma demanda más ayuda del Gobierno central. Señaló que uno de los mayores impactos de este éxodo se ha sentido en el empleo porque, de hecho, esta capital no tiene una gran oferta a los cucuteños.