El periodista Gustavo Álvarez Gardeazabal le dirigió esta misiva al doctor Mauricio Flores Marín, Vicepresidente Corporativo del BBVA:
No sé si usted todavía trabaja en el BBVA. La última vez que tuve oportunidad de solicitar su intervención en favor de un reclamo de mi parte, usted fue un fracaso total como relacionista público y como amigo.
Ahora resulta, como puede ver con el correo que le adjunto, que a las 19:21 hice un retiro en el cajero del BBVA del Centro Comercial La Herradura de Tuluá (caja 0965,19:21:51,07/05/12,trans 5566, número tarjeta xxxx 5383).
Cuál sería mi sorpresa cuando en vez de los 8 billetes de 50 mil pesos aparecieron 8 billetes de monopolio de la marca Diebold distinguidos con el número 5. He hecho las reclamaciones de rigor a través del Call Center que me ha dado el número 170553851705.
La queja continúa. Lo periodístico del asunto es que a más de que los cajeros del BBVA pagan con billetes de monopolio (tal vez por la crisis española) es que esos billetes están contramarcados con el nombre de la firma fabricante del cajero al que tuve acceso: Diebold.
Acudiré inicialmente ante la oficina del banco donde mejor me puedan atender para asentar la reclamación personalmente y como me dijo el Call Center "devolver los bonos sin valor que usted recibió". Con posterioridad iré a la oficina de mi abogado para plantear la mínima querella que creo se merece un cliente engañado, pues el débito se hizo (ver el aviso del banco a mi correo) y el Call Center me ratificó que había sido descontada esa suma de mi cuenta.
Qué extraña coincidencia, tocarme a mi a esta edad jugar Monopolio con un banco de verdad que le roba la plata a sus clientes de manera tan novelística. Gustavo Álvarez Gardeazabal.
Los caballos de Troya. Tras un año de encontrarse vacante una de las magistraturas de la Sección 5° del Consejo de Estado, no ha sido posible elegir el correspondiente reemplazo. La razón: Los caballos de Troya del ideario conservador. Uno, localizado en la Sala de Consulta, de la más rancia estirpe payanesa, liderada por Enrique José Arboleda, y otro del grupo de los llamados "Tolimensos" ahora evocados por los 40 años de hacer reír a Colombia en el programa "Sábados Felices". Lo más grave es que su participación en la elección, también para la Corte Constitucional, no es motivo de risa.
No sienten pena. El asunto es tan delicado que los "Tolimensos", después de haber votado la anulación de la elección de la fiscal Viviane Morales en uno u otro sentido, ahora pretenden promoverla como candidata a la Corte Constitucional.
Cabe preguntarnos ¿qué clase de magistrados están llegando ahora a administrar justicia en Colombia? ¿No era al menos digno que se hubieran declarado estos jefes de debate de la Fiscal impedidos para intervenir en el proceso que terminó con su salida?