Fiscales militares de Estados Unidos pidieron este lunes que el soldado Bradley Manning sea condenado a al menos 60 años de cárcel por haber entregado al sitio WikiLeaks centenares de miles de documentos secretos.
El capitán Joe Morrow urgió a la jueza militar Denise Lind que imponga una condena severa para "enviar un mensaje a cualquier otro soldado que contemple robar información clasificada".
Manning, un exanalista de inteligencia militar de 25 años, fue condenado en julio por espionaje por filtrar a WikiLeaks miles de documentos sobre las guerras de Irak y Afganistán, por lo que podría pasar más de 100 años en la cárcel.
Morrow rechazó el argumento de la defensa, que presentó a Manning como un soldado ingenuo y con problemas que creyó que hacía el bien al hacer público lo que consideró eran abusos del gobierno estadounidense en los conflictos de Irak y Afganistán.
El fiscal militar afirmó que la filtración de documentos fue "destructiva" y sostuvo que Manning "decidió aprovecharse de un sistema imperfecto". "Debemos asegurarnos de que nunca más asistiremos a este circo", destacó el fiscal, convencido de que la "traición" del soldado había dañado las relaciones diplomáticas de Estados Unidos.
El joven militar, de 25 años, reconoció que entregó 700.000 documentos confidenciales al sitio de internet WikiLeaks. Se declaró culpable de una decena de cargos, que pueden suponer una condena de 20 años de prisión, pero la juez Lind lo halló culpable de hechos de espionaje y fraude.
Por su parte, el abogado de Manning, David Coombs, criticó al gobierno por considerar que "quiere que se pudra en la cárcel" y que "sólo le interesa el castigo" y no la reinserción de un acusado "joven", "humanista", "muy inteligente", "ingenuo, ciertamente pero bien intencionado".
Considerando su juventud, su "salud emocional" y "la pureza de sus intenciones", el abogado pidió a la jueza que castigue a su cliente pero con una pena que le dé la "posibilidad de vivir (...), tal vez de encontrar el amor, de casarse, de tener hijos y de verlos crecer".
Mientras que el abogado defensor se esforzó en convencer que "el impacto a largo plazo" de la fuga era limitado y que "numerosos países ya la habían olvidado", el fiscal militar insisitió en el aspecto "destructivo" del comportamiento de Manning, quien había elegido "conscientemente" ser analista de inteligencia en Irak y "abusado de su posición de confianza".
Tras dos meses y medio de proceso en una corte marcial, la jueza Denise Lind se retirará a deliberar el martes al mediodía.